La ciudad de Valencia aspira a liderar la implantación en toda la provincia de las líneas de tratamiento medioambiental incluidas en su Plan de Acción para la Energía Sostenible, presentadas ayer en la reunión del Pacto de los Alcaldes por la Adaptación, que tuvo lugar en el Centro Cultural Bancaja. Según explicó la concejala Mª Àngels Ramón-Llin, en la capital se ha avanzado mucho en el ahorro energético y la reducción de CO2, por lo que su intención es, con la fórmula que se quiera, ampliar estas medidas a otros municipios más pequeños que no disponen de medios o financiación.

Las jornadas fueron inauguradas por la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, quien lanzó la idea de crear el «Club Español del Pacto de Alcaldes», cuyo objetivo sería «intercambiar información medioambiental entre las ciudades españolas, y que este club actúe como canal de comunicación entre los municipios y la Unión Europea».

Rita Barberá explicó que solamente en el periodo comprendido entre 2007 y 2012, la emisiones de CO2 a la atmósfera en nuestra ciudad se redujeron en un 13,3 %, todo ello gracias a la «Estrategia frente al cambio climático Valencia 2020», articulada a través Plan de Acción para la Energía Sostenible.

«Ese es el mejor dato, el estímulo más importante para seguir con una acción de Gobierno que reafirma nuevamente nuestro compromiso y nos sitúa a la vanguardia europea», dijo la alcaldesa antes de desglosar la importante reducción de emisiones contaminantes en solo 5 años, que fue del 22,4 % en el transporte; del 20,3% en residuos; del 8,4% en servicios y del 7,5% en administración. «Esa reducción supuso un descenso de las emisiones en 2012 de casi 435.000 toneladas, a solo 200.000 del objetivo previsto de alcanzar una reducción del 20% antes del año 2020», dijo.

Detalle técnico

Ya en plenas jornadas, el técnico municipal Juan José Herrera, detalló el trabajo realizado en Valencia en todos los campos. Por ejemplo, el 70% del alumbrado de Valencia puede regularse (más o menos intensidad) según las horas del día; todos los semáforos tienen iluminación led, lo que permite un ahorro del 85%; y en instalaciones como el Palacio de Congresos o la EMT se han colocado placas fotovoltaicas.

Por lo que se refiere al transportes, el 41% de los desplazamientos se hacen a pie y sumando la bici se llega al 76%, todo ello, dijo, gracias a los 170 kilómetros de carril bici. Así mismo, se han peatonalizado más de 50 calles y plazas (5% de la superficie de calles); todo el centro y alguna zonas periféricas se han convertido en calles 30 y Valenbisi ha llegado a superar los 100.000 usuarios, lo que ha quitado 25.000 vehículos de las calles.

Finalmente, se ha conseguido depurar 315.000 metros cúbicos de agua diarios; la recogida de basura selectiva se ha incrementado un 50% en ocho años; y todos los valencianos están a menos de 300 metros de una zona verde.

Para Ramón-Llin, estas medidas pueden y deben aplicarse en todos los municipios, incluso en los más pequeños, por lo que Valencia está dispuesta a liderar algún tipo de fórmula para mejorar la coordinación y buscar vías de financiación.

Ayer, en la reunión del Pacto de los Alcaldes, ya se hicieron algunas demandas y se aportaron algunas soluciones.