Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Divagaciones

Amores y desamores

Amores y desamores

Siento que la política, sobre todo en tiempos de elecciones, es un gran hastío. Creo que por eso he huido a refugiarme al carrer del Cavallers, en la curiosa bruma del pasado. Y me he escapado en bici por el cauce del río a contemplar en el crespúsculo, ese cielo de un azul tan nuestro. Tiempos difíciles para nosotros, pueblo indignado, cansado, que no sabe cómo combatir una realidad política que le abruma.

Sin embargo el tiempo de las elecciones es tiempo de conquista, de atracción, es el juego de la seducción cuando los partidos políticos coquetean con su electorado, dicen y prometen lo que él/ella quiere oír. Hombre o mujer, no importa, quizá lo llevo al género neutro, así me desvincularé de todo sentimiento femenino o feminista? El electorado preocupado por la situación, y exasperado está sumergido en un tedio desilusionante, pero escucha la voz de la promesa:

-¿Quién eres?„ pregunta el electorado.

-Yo soy tu pasado que no es como tú lo ves, o como te lo dicen porque sacan cosas de contexto? y te equivocan, soy el futuro, un futuro lleno de promesas que nunca terminan.

-¿Estoy soñando?

-Eres la música que me inspira, formas parte de mi gran sinfonía.

-Me das miedo, no quiero escucharte, no te creo.

-Toma todas las flores de mi jardín.

-No quiero flores que se marchitan.

-No temas. Prometo días de vino y rosas. Te daré lo que tú quieras.

-No? no prometas? No quiero ni vino, ni rosas, prefiero libertad sin mordazas; trasparencia sin engaños; justicia independiente; educación sin barracones, sanidad pública, sincopado, ni listas de espera. No más paro. Abre horizontes a la cultura? Afronta los verdaderos problemas y da soluciones? No me engañes, no adornes tus frases que necesito creer. Cuando hablas de ecología, lo haces porque suena bien, pero despilfarras y engulles la naturaleza como festín.

-La naturaleza es preciosa, cógeme de la mano y caminemos juntos, yo te la enseñaré.

-¿Sabes acaso algo de la naturaleza?

-Tengo asesores que me orientan sobre ecología? Controlo los misterios de la tierra. ¡Mírame! Conmigo encontrarás la paz que necesitas.

-No lo sé, no te conozco, ¿quién eres?

-Soy aquel que no duerme, que no descansa, el que vela por tu bienestar.

-No quiero lindezas que alimenten mi pesar, cuéntaselo a otro que te pueda creer, prefiero mi música y mi soledad. Odio tu voz que insulta y ataca?

-Atacar es solo una defensa. Tú no sabes el daño que me hacen.

-Eres prepotente y vanidoso, por favor, déjame? Eres solo un vendedor de sueños.

-No me abandones así, no te escondas, no te alejes? llegará el momento y lo perderás. Me entrego a ti, te lo ruego, me necesitas como yo a ti? La democracia es esencial, imprescindible.

-¿Democracia? ¡No me hagas reír! Tus palabras son mero reflejo de la verdad.

-Otros mienten. Yo soy un romántico que persigo tu sueño en este mundo desquiciado y perdido, seré lo que tú esperas, no más quimeras?

-uiero creerte, no cambies tus promesas por pesares y me abandonaré a ti.

Y? después de los primeros fervores, de las románticas noches de luna, de las cenas con velas? la cotidianidad, la rutina, y vuelan las promesas como hojas muertas del otoño barridas por el viento. El desamor camina lento, vacio de verdad. Y Mina canta: «Parole, parole, parole?».

Compartir el artículo

stats