Para trabajar en su propuesta, los comerciantes del centro histórico ya han elaborado una lista de trece calles en las que es necesario colocar vigilancia electrónica. En las calles Convento de Santa Clara, Ribera, Paseo de Russafa, Plaza de Santa Catalina y Plaza de la Reina se concentra el problema del «top manta», que los fines de semana se dispersa también por las calles Trench, Plaza Lope de Vega o calle Pescadería. En el caso de la prostitución, la zona más afectada, según los comerciantes, es la que conforman las calles Barón de Cárcer, Adressadors y Escolano, cercanas al denominado barrio chino de Valencia. Y si sumamos las oleadas de robos de los últimos tiempos, frecuentes en todo el centro de la ciudad, habría que sumar también San Vicente, Plaza Redonda, Linterna y Maestro Clavé.