El alcalde de Valencia, Joan Ribó, se ha reunido hoy con el conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà, en su primera toma de contacto para tratar cuestiones pendientes entre ambas instituciones. El encuentro ha tenido como anécdota el selfi entre ambos en el balcón del consistorio.

Ribó ha subrayado la necesidad de que haya "escuelas de calidad cerca de donde viven las personas" y se ha comprometido a que todos los barrios tengan escuelas públicas que eviten a los ciudadanos desplazarse, como ocurre con "el desastre del distrito único".

Por su parte, Vicent Marzà ha añadido que se abrirá el debate sobre este tema a la sociedad a partir de septiembre, "porque la escolarización ya está hecha y no afecta al próximo curso".

El conseller ha valorado el encuentro con Ribó y ha manifestado la voluntad de trabajar de forma coordinada entre Ayuntamiento y Conselleria "para mejorar la calidad educativa", para lo que se creará un grupo de trabajo con el objetivo de "una educación pública, de calidad y para todos lo barrios".

El alcalde de Valencia ha señalado que hay que "mejorar mucho la enseñanza" porque la anterior consellera, María José Catalá, "ha maltratado la educación pública".

Joan Ribó ha destacado que en la reunión han tratado la situación de diversos solares municipales aprovechados por entidades privadas, como un solar escolar de Campanar que se traspasó para que se hiciese un hospital privado, de la universidad Católica, y ha señalado que los solares públicos "serán solo para centros educativos públicos".

Con la proximidad del inicio del curso, uno de los temas que preocupa a los padres son las ayudas para libros, que Compromís recogía en su programa, y el conseller ha afirmado que se estudiarán los recursos disponibles para facilitar este recurso.

Respecto a las críticas de Català ante la posible eliminación del castellano de las líneas de valenciano, Marzà lo ha negado y ha asegurado que lo que proponen es que las decisiones las tome cada centro en función de su contexto para adaptarse a las necesidades de sus alumnos, "que podrán elegir si quieren cursar una asignatura no lingüística en valenciano o en castellano".

Asimismo también han hablado sobre su propuesta de eliminar una de las tres optativas de Bachillerato, de forma que estas horas pasen a las asignaturas troncales, que tendrían así cuatro horas semanales y el conseller ha negado que la asignatura que se eliminaría sería religión.

Respecto al tema de los comedores sociales, el conseller ha informado de que se está tratando con los diferentes municipios y Ribó ha afirmado que la asignación de estas ayudas en Valencia fue una de sus primeras actuaciones al llegar al Ayuntamiento, pues "ya habían sido planteadas por el PP, pero no estaban asignadas".

Tanto el conseller como el alcalde han expresado su voluntad de articular los comedores escolares de forma conjunta y de que sea "una especie de escuela de verano en la que no se destaquen aquellas personas que tienen problemas económicos", en palabras del alcalde.

Joan Ribó ha hablado del modelo de educación pública al que aspiran comparándolo con el de Finlandia o Dinamarca, "no como el modelo de Català" y Marzà ha añadido que se apoyarán en la innovación y en experiencias positivas de otros países, que devuelvan el prestigio a la escuela pública.