Joan Ribó está decidido a que el Ayuntamiento de Valencia presente alegaciones, como corporación municipal, a los Presupuestos Generales del Estado adelantados el martes por Cristobal Montoro. Así lo advirtió ayer Ribó, quien criticó duramente la «descarada discriminación» especialmente en los capítulos de infraestructuras y cultura. El «maltrato» hacia «la tercera ciudad de España», según el alcalde, lo evidencian no sólo las inversiones previstas para 2016, sino los ingresos directos del gobierno español y cuya primera previsión conocieron ayer mismo, un día después de hacerse públicas las cuentas del Estado. Ribó incidió en el «llamativo descenso» del 1,95 por ciento, pues pasarán de 341.167.000 euros a 334.498.000 euros, lo que puede «suponer recortes» en algunas partidas que tenían ya previstas. «Rajoy dice que son unos presupuestos estupendos, pero el Ayuntamiento de Valencia dice que hay bajada de ingresos y que en inversiones ha hecho un destrozo absoluto», lanzaba Ribó.

«Nosotros no estamos dispuestos a que Valencia sea discriminada de forma tan descarada respecto a otras grandes ciudades. Los valencianos no nos merecemos este castigo. No nos vamos a quedar callados», avisaba. Pese a ello, Ribó negaba que tan «evidente discriminación» se deba al cambio de gobierno en el Consell y el Ayuntamiento. Así, recordaba que en 2013, cuando gobernaba el Partido Popular en las tres administraciones, los valencianos recibían per cápita un 43% menos que la media del Estado, que ahora es «sólo» un 26% menos. De ahí que instara a reivindicar «con seriedad y rotundidad», a dejar de «hacer ruido por hacer ruido» y a «romper la imagen del Levante feliz» para lograr los recursos que se necesitan.

En obras públicas censuró que los PGE «sólo» contemplen en infraestructuras ferroviarias cinco millones de euros para Vara de Quart-Font de Sant Lluís y que el túnel de Serrería se quede «sin dotación». Ribó se permitió ironizar, con el «compromiso cierto» del Ministerio de Fomento con Valencia anunciado en marzo «a bombo y platillo» por la exalcaldesa Rita Barberá «para destinar 130 millones a Serrería» y 900 para el Parque Central y la estación definitiva del AVE, para reiterar que no existe «res de res». Así, tachaba también de «escandaloso» que reciban poco menos de millón de euros para Cercanías „la línea Valencia-Utiel„, mientras Madrid disponga de 330 millones, Barcelona 150 y Sevilla 51.

Del contrato-programa para el transporte metropolitano, criticaba la decisión de Francisco Camps de ponerle fin. Ahora Valencia recibiría «entre 50 y 60 millones», por lo que trabajarán con la Conselleria de Infraestrucutras para ponerlo en marcha cuanto antes.