El valenciano volverá a ser preferente en la señalética y la rotulación de las calles de Valencia, según estipula el Reglament sobre l´Ús i la Normalització del Valencià en la ciudad. La norma, aprobada por unanimidad en 1996 por todos los partidos que entonces formaban parte del consistorio (PP, UV, PSPV y EU) lleva sin desarrollarse desde entonces. El concejal del área de Gobierno Interior, Sergi Campillo, aseguró que Valencia vivía hasta ahora con una «anomalía democrática» al obviar esta normativa. «El reglamento se aprobó en 1996 y no se envió al Boletín Oficial de la Provincia hasta 2005, cuando es un trámite de días. Desde entonces no se ha desarrollado, lo que habla del poco interés del anterior gobierno en el valenciano. Por eso, este gobierno, que sí que estima su lengua propia y la considera una herramienta útil para toda la ciudadanía ha decicido crear el Gabinet de Normalització Lingüística», anunció el regidor de Compromís.

La «anomalía democrática» a la que se refirió Campillo era de tal calibre que el Ayuntamiento de Valencia solo contaba hasta ahora con un traductor de valenciano para sus 5.000 trabajadores. Esa persona será el nuevo jefe de servicio del Gabinet de Normalització, que contratará a tres nuevos traductores. El equipo de gobierno cree que diez funcionarios para este servicio es el número ideal, aunque es una cifra que espera alcanzar progresivamente.

Sergi Campillo recordó que los ciudadanos de Valencia tienen el derecho a comunicarse con su Ayuntamiento en las dos lenguas cooficiales, por lo que promoverá cursos para que los funcionarios utilicen con normalidad el valenciano. «Este gobierno solo quiere cumplir con la legalidad. Tenemos la obligación de fomentar la lengua propia, pero vamos a hacerlo de manera tranquila, progresiva, dialogada y no será un proceso nada traumático ni para los ciudadanos ni para los funcionarios. La rotulación de calles y señalética también será progresiva», explicó el concejal.

El Ayuntamiento de Valencia firmará en breve el protocolo de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, que según fija la ley autonómica es la entidad que fija las normas del valenciano.