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"No queremos vivir de lujo, queremos vivir bien"

Más de 160 peticiones para mejorar la vida de los barrios

Los vecinos presentan al consistorio sus necesidades de cara a la elaboración del presupuesto municipal

Alquería de la Torre Levante-EMV

Más de 160 propuestas y solo 12 millones de euros. La Federación de Asociaciones de Vecinos presentó la semana pasada al consistorio las demandas que desde numerosas asociaciones quieren que el consistorio tenga en cuen- ta a la hora de abordar la elaboración de los presupuestos de 2016. En campaña, Compromís se comprometió a configurar unos «presupuestos participativos». La premura del tiempo ha impedido que sus planes se hagan realidad pero, a modo de compensación, el ayuntamiento se ha comprometido a que casi un 20% del presupuesto, unos 12 millones de euros, se dediquen a las peticiones vecinales que aprueben las juntas de distrito. Así, estos presupuestos serán una especie de ensayo del proceso verdaderamente participativo que se quiere llevar a cabo a partir de ahora. Aunque los plazos todavía no están claros, y dada a la premura del tiempo no todos los vecinos tienen organizadas y listadas sus demandas, en diciembre se aprobará el presupuesto vecinal, reservando esos 12 millones para esas actuaciones vecinales que están por decidir y que no se consignarán hasta febrero.

Quien se ha adelantado y ya tenía sus propuestas es la Federación de Asociaciones de Vecinos, dado que todos los años pasaba este listado al consistorio. Sin embargo, esta vez serán las juntas de distrito quienes tengan que elegir entre las medidas que ellos proponen y las de otros vecinos o asociaciones que harán llegar al consistorio sus exigencias mediante otras vías. Las que siguen, son las principales propuestas que la Federación de Asociaciones de Vecinos ha entregado al alcalde ordenadas por distritos.

La larga lucha por el polideportivo de Nou Moles

En este distrito la Federación solo ha podido trasladar las demandas de la Asociación de Vecinos de Nou Moles, que continúa con la histórica reivindicación de que al fin se pongan en marcha las obras del polideportivo cuya construcción lleva años paralizada. El 16 de noviembre, de hecho, han convocado una manifestación para que se ponga fin a esta larga espera. Más allá de eso, le piden al ayuntamiento que se urbanice el solar de la calle Manuel Rivas, que se utiliza como aparcamiento aunque está sin asfaltar y «lleno de socavones y charcos enormes cuando lleve». Según explica Casilda Osa, la presidenta de los vecinos, además de eso, el solar concentra «a bichos de toda clase y muchísimo polvo y los vecinos ya estamos hartos». Asimismo, demandan que el consistorio «se acuerde» de la Universidad Popular y del traslado a un local de titularidad municipal que estaba previsto para este año y que se aplazó al destinar el consistorio a última hora los fondos que estaban previstos para ello a becas de libros.

Reurbanizaciones y nuevos accesos

Que se construya una nueva entrada al barrio desde Ronda norte donde la salida de Burjassot es la principal demanda que los vecinos de Ciudad Fallera realizan al consistorio para reducir así las vueltas que tienen que dar para salir de su barrio. También suman a su lista de demandas algo que vienen reclamando desde hace mucho tiempo y que el propio Síndic de Greuges ha pedido al consistorio: la rehabilitación y recuperación de las históricas alquerías de la Torre y el Moro así como del Chalet del Americano para dotarlas de un nuevo uso público. Asimimo, exigen que se destine una partida específica para «conservar y dignificar» las naves falleras que dan identidad al barrio.

En Campanar también quieren que se recupere una alquería, en este caso de Pallardó, para convertirla en centro cívico. Además, demandan la urbanización del entorno del PAI Padre Domenech y la ampliación de las aceras de la calle Rascanya.

En Zaidia, las peticiones se concentran en el entorno de la calle Economista Gay: piden su reurbanización y además que se construyan aceras en el tramo que da al Camino de Moncada. Que se arreglen los solares abandonados «para que tengan una función para los vecinos» y las aceras es otra de las claves, así como que se construyan áreas de deporte y zonas verdes, ya que actualmente el barrio carece de ellas. Asimismo, quieren que se construya un centro social «para que la gente mayor pueda ir allí y que incluya ordenadores y zonas de juego», explica Gregorio Sebastián, el presiente de la asociación de vecinos. «No es que queramos vivir de lujo, solo pedimos áreas para garantizar una buena calidad de vida», concluye.

En Torrefiel, donde siempre han denunciado el «abandono» que sufren por parte de las autoridades municipales, demandan fondos para mejorar el polideportivo municipal, que se asfalten diversas calles y que se construya un centro de día para personas mayores.

Unidos para conseguir una senda para bicis y peatones

En el distrito del Marítim, al margen de las reivindicaciones que cada asociación de vecino ha hecho para sí, muchas de ellas, incluyendo El Saler y colectivos del 15M, se han unido para reivindicar una senda que conduzca desde el centro de la ciudad hasta el litoral. «Esta ciudad tiene un problema para conectarse de forma sostenible entre el centro y la costa y una vez desechada la idea de conectarlo a través de Blasco Ibáñez, lo más normal es que se haga a través del río», explica Julio Moltó, presidente de la Asociación de Vecinos de Nazaret. Se trataría de una senda que una la Ciudad de las Artes y las Ciencias con Nazaret y que incluya enlaces hacia la dársena histórica, el paseo marítimo y el carril bici que va a Pinedo y El Saler.

Al margen de esa consulta, Moltó asegura ser consciente «de las dificultades de presupuesto» por lo que desde asociación proponen «partidas de bajo coste». Entre ellas figuran la apertura de la calle Río Seña, «que está aislada» para conectarla con el Puente del Astillero. Piden también la reforma de algunas aceras y que se pinten nuevos pasos de peatones así como la reapertura y el acondicionamiento de la piscina al aire libre del barrio.

En lo que se refiere a otros barrios del distrito, los vecinos de la Malva-rosa, a través de sus dos asociaciones, reclaman un centro de personas mayores así como la reurbanización de diferentes calles. En la zona de Vilanova del Grao también quieren un centro de día, mientras que en Baleares Grao piden que se construya un jardín en un solar abandonado. Los vecinos de Ayora exigen una reforma integral de la calle Ramiro de Maetzu y que se reforme y acondicione el Palacete de Ayora para instalar la sede de la Universidad Popular.

Orriols pedirá aparte

En este distrito destaca la ausencia de propuestas de dos barrios tan combativos y necesitados como el Cabanyal y Orriols. La presidenta de los vecinos del primero, Pepa Dasí, explica que este año no están en disposición de formular ninguna propuesta hasta que no se configure el plan de rehabilitación del Cabanyal porque todavía no saben a qué deben atenerse. Desde Orriols, Maika Barceiro lamenta que son tantas las carencias del barrio que «es imposible priorizarlas en un documento conjunto», por lo que se reunirán en los próximos días con el alcalde para entregarle un documento pormenorizado con las «innumerables» necesidades de la zona.

Más iluminación y mejora de aceras en San Vicente

Las distintas asociaciones de vecinos por las que discurre la calle San Vicente piden que se cambien la farolas en algunos tramos así como que se mejoren las aceras. El traslado de la subestación de Patraix también figura entre las peticiones de la mano de los vecinos de Favara, que exigen además que se acabe el jardín de Padre Jofré. En San Isidro quieren que se elimine el cableado aéreo y se cambien las farolas así como que se amplíen las aceras. La asociación de Tres Forques quiere que se reabra el parque de bomberos y que se creen más espacios para jóvenes, mayores y la práctica del deporte.

Uno de los barrios más degradados de la zona es San Marcelino. Tomando como ejemplo lo ocurrido en Patraix, el portavoz de los vecinos, Vicente Soler, pide que se peatonalice el entorno de la iglesia para revitalizar el barrio. «No tenemos ningún lugar de reunión y allí es donde nos encontramos en fallas o en las fiestas del barrio y se nos hace muy difícil cortar el tráfico en esta zona», explica. Asimismo, exigen que se acabe con los solares abandonados y se produzca un «reasfaltado de las calles en general».

Recuperación de las naves de Demetrio Ribes

En Russafa los vecinos reclaman que se adecuen las Naves de Demetrio Ribes para ser un centro de día y un polideportivo y que se reurbanicen algunas calles. Los vecinos de Fuente de San Luís quieren un centro social polivalente, mientras que los de La Torre exigen parques ajardinados, un nuevo campo de fútbol y que se amplíen y reformen las aceras para hacerlas accesibles. En Malilla también demandan un centro de mayores y un centro polivalente, al igual que en Monteolivete, así como que se finalice el parque Sur.

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