La Asociación de Comerciantes del Centro Histórico y el Ayuntamiento de Valencia ya tienen perfilada la Navidad de este año. Ya se confirmó la pista de hielo, al menos este año, y se creará otro polo de atracción en la Plaza de la Reina, en la que se instalará el belén monumental y también una feria de atracciones para niños pequeños. Además, el tradicional mercado de Navidad, que estos años atrás se ha colocado en la calle Hospital, volverá a la cercana calle Barón de Cárcer, donde estuvo siempre y donde cosechó sus mayores éxitos.

Por lo que se refiere a la pista de hielo, ésta volverá a instalarse un año más en la Plaza del Ayuntamiento y lo hará en las condiciones que proponían, como ya informó este periódico, los propios comerciantes, es decir, poner la pista grande y la infantil juntas y desplazar el árbol de Navidad al otro lado de la explanada, la que da a la fuente y la calle las Barcas.

No habrá nada más en la plaza y además su continuidad en años posteriores está en el aire. Según fuentes de la asociación de comerciantes, el equipo de Gobierno no ve con buenos ojos esta atracción, entre otras cosas por el elevado coste energético, aunque ellos insisten en que esta instalación se autofinancia y no cuesta ni un euro a las arcas municipales.

La pista, en el aire

Así pues, la pista se mantendrá este año y posiblemente el año que viene, que es la petición de los comerciantes para amortizar la inversión que hicieron hace dos años, pero no es segura su continuidad después. De hecho, los comerciantes le han pedido al consistorio que les haga otras propuestas más acordes con nuestra cultura y nuestro clima, si es eso lo que quieren, pero que tenga la misma atracción popular que la pista, pues el sentido de todo esto es atraer clientes al centro y mejorar las ventas de sus establecimientos. «Si esa propuesta llega, la cambiaremos sin problemas», afirman.

De cualquier forma, los comerciantes piensan también en ampliar los reclamos navideños. Este año, de hecho, ya se creará un segundo polo de atracción en la Plaza de la Reina. Allí se instalará, en el jardín que pega a la catedral, el belén monumental que siempre se ha instalado en la Plaza del Ayuntamiento. Así mismo, se instalarán atracciones para niños pequeños, que es uno de los reclamos que les han hecho llegar las familias. Y en la casa consistorial, concretamente en el Salón de Cristal, se colocará otro belén cuya autoría todavía no se ha desvelado.

Entre ambas pazas, se creará una especie de circuito comercial y de ocio que esperan que sea muy beneficioso para todos. Es más, para el año que viene la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico se propone hacer una tercera zona navideña en el Eixample. Al parecer, los comercios de esta zona lo han pedido este año y ha sido posible, dijeron las fuentes, porque las obras de remodelación de varias de sus calles lo hace inviable.

Puede hacerse incluso una ruta de belenes, pues en el centro histórico están previstas varias instalaciones en un espacio muy pequeño.

Atraer al público joven

«De lo que se trata es de que los jóvenes y los niños, que son el futuro, tengan como referencia navideña el centro de la ciudad, cosa que no ocurría de aquí para atrás», aseguraron las fuentes.

Por lo que se refiere a la pista de hielo, la intención de los comerciantes es ponerla en funcionamiento el primer fin de semana de diciembre y mantenerla en marcha hasta el día de Reyes, pues aguantar una semana más, como se ha hecho en años anteriores, no resulta muy coherente con la iluminación navideña apagada. Por cierto, este año la iluminación navideña se ampliará a los barrios de la ciudad en detrimento, ligeramente, del centro de la ciudad, que ya tiene estas otras atracciones.