El Consorcio Valencia 2007 adjudicó ayer, con varios meses de retraso sobre el calendario inicial, las obras de demolición de la antigua base del equipo Luna Rossa, diseñada por el arquitecto naval Marcelino Botín, a la empresa Surus Inversa. La base del Luna Rossa se encuentra en una ubicación estratégica, en la zona norte, la más próxima a la ciudad, a espaldas de los barrios del Cabanyal y Canyamelar. El derribo de esta base, que como el resto fue concebida como un edificio efímero, permitirá liberar parte el anillo de la dársena histórica. Tras la demolición la zona se recuperar como zona verde y de zona de juegos infantiles. Al concurso para el derribo de la base del Luna Rossa, con un presupuesto de 158.000 euros que incluye la posibilidad por parte del adjudicatario de vender del material de derribo, se presentaron 13 empresas. En este sentido,e l concurso se ha resuelto con un saldo a favor del Consorcio que será compensado con 8.300 euros por parte del adjudicatari por la venta de los materiales de derribo y residuos. Los trabajos demolición comenzarán a principios del mes de diciembre y durarán 8 semanas.

Con estos derribos, explicaron ayer fuentes del Consorcio Valencia 2007, la Marina continúa con la apertura a la dársena histórica, proceso que comenzó con la posibilidad del tránsito libre de viandantes y ciclistas frente a las bases norte; el derribo del vallado que separaba el recinto de la playa de las Arenas y el Paseo Marítimo y la demolición de la base «China Team», el antiguo edificio de televisión y las naves que flanqueaban el edificio Antiguo Varadero el pasado año.

La base del Luna Rossa está a pocos metros de las tres que ha ocupado el centro de innovación impulsado por el empresario Juan Roig (Mercadona).