Los tres concejales de València en Comú en el Ayuntamiento de Valencia, Jordi Peris, María Oliver y Roberto Jaramillo, han apoyado el acuerdo de la asamblea sobre el destino de los excedentes salariales de los concejales y asesores municipales. A saber, un 19% para la organización; hasta un 15%, lo que decida cada concejal, para Podemos; y el 66% para fines sociales.
«Partimos de posturas diferentes, incluso contrarias, pero coincidimos en la convicción de que había que hacer lo mejor para València en Comú», dice la organización, dos de cuyos concejales, Peris y Jaramillo, eran partidarios de que el dinero fuera a fines sociales y no a entidades políticas.
«Durante la negociación —continúa— hubo tiempo y oportunidad de poner sobre la mesa todas las cuestiones y matices necesarios para alcanzar un acuerdo. El proceso de diálogo y el resultado no han hecho más que fortalecer a València en Comú y ponerla en disposición de poder cumplir con los objetivos para los que nació como plataforma ciudadana municipalista».
Código ético
Así mismo, la organización considera que no se ha roto su código ético a la hora de decidir y acordar el destino de los excedentes salariales de sus cargos públicos, ya que, «como se especifica en dicho documento, los cargos públicos de València en Comú se comprometen a limitar nuestro salario a tres veces el salario mínimo interprofesional. El resto —añaden— será destinado a organizaciones municipales y plataformas de barrio que fomenten la participación, previa consulta ciudadana, lo que evidencia tanto el cumplimiento estricto de nuestro código en lo referente al destino de los excedentes salariales de nuestros cargos públicos como el compromiso irrenunciable de la plataforma municipalista con organizaciones sociales y movimientos ciudadanos».
