El Pleno del Ayuntamiento de Valencia aprobó ayer, con los votos a favor del tripartito y los votos en contra del Partido Popular y Ciudadanos, el presupuesto municipale para el año 2016, que asciende a 753,68 millones, un 2,1% más que en 2015. El concejal de Hacienda Ramón Vilar dejó una de esas frases lapidarias para defender la inversión y el gasto del consistorio: «Que esperen los bancos porque los ciudadanos no pueden esperar».

El portavoz del PP, Alfonso Novo, consideró que al presupuesto de 2016 «le falta alma social y empuje para la ciudad». «Y le falta mejorar la calidad de vida a los ciudadanos, por eso votamos que no. Ustedes no tienen modelo de ciudad. No priorizan cuestiones sociales y desaprovechan para afianzar el crecimiento económico de la ciudad», argumentó.

Por su parte, Fernando Giner recordó que Ciudadanos se abstuvo en la presentación de los presupuestos para presentar alegaciones, pero que tras ser rechazadas todas, también votaban negativamente. El portavoz de C´s se preguntó por qué hay 100 millones de euros «sin asignación, sin concreción».

En el pleno también se aprobaron las propuestas de Ordenanzas Fiscales para 2016 con los votos de Compromís, PSPV-PSOE y Valencia en Comú, con apoyos puntuales de Ciudadanos. Ramón Vilar se refirió al Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) e insistió en que el recibo para el contribuyente «será igual que en 2015, a excepción de las previsiones para los inmuebles de mayor valor catastral».

El tripartito aceptó una alegación de Ciudadanos para que el recibo del IBI no suba para las familias numerosas con rentas hasta 80.000 euros. Giner pidió que se elevara ese techo hasta los 90.000 euros, mientras el gobierno de Ribó lo cifró inicialmente en 60.000. Así pues, el acuerdo fue un tiro y afloja entre ambos partidos.

Giner le recordó al PP que los impuestos «sí que han subido» en los últimos años en Valencia «porque en 2012 llegaron los hombres de negro a Valencia. Le invito un café señor Monzó y se lo demuestro», le reprochó al concejal popular tras defender la gestión de la etapa de Barberá.

En el pleno también se aprobaron las tarifas de la EMT para 2016. El concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, pidió «un esfuerzo a los mayores porque hacemos solidaridad intergeneracional» para justificar el incremento de dos euros anuales del Bono Oro. Ciudadanos se abstuvo, mientras el PP votó en contra. «Ha colgado el cartel en la EMT de liquidación por quiebra», acusó el popular Alberto Mendoza a Grezzi por defender las tarifas.

Durante la sesión se aprobó por unanimidad autorizar la concertación de una operación de crédito a largo plazo de 1,6 millones de euros del Palacio de Congresos de Valencia para poder pagar a los distintos proveedores.