El Ayuntamiento de Valencia ha iniciado obras de restauración en las torres del edificio principal por riesgo, «a medio plazo», de desprendimiento. Así lo explicaron ayer fuentes municipales, que señalaron que las obras de restauración de ambas torres tienen un coste de 60.000 euros.

En estos momentos han comenzado los trabajos en la torre norte, la situada sobre la calle de la Sangre. Está previsto que duren tres semanas y que el andamio que protege la cúpula de la torreta desaparezca antes de Fallas para que la visión de la casa consistorial sea «óptima», según explicaron las mismas fuentes. La otra torre, la situada sobre la calle Periodista Azzati, se restaurará después de Fallas.

Además, aseguraron que por el momento no hay riesgo de desprendimientos, pero señalaron que se temía que, a medio plazo, hubiera caída de cascotes, como ya ocurrió en 2013 en la fachada principal. El edificio es la antigua Casa de Enseñanza, levantada entre 1758 y 1763, aunque sufrió distintas modificaciones entre 1901 y 1904 para añadir nuevas dependencias. Alberga el ayuntamiento de la ciudad desde 1854, cuando el estado de ruina de la antigua Casa de la Ciudad, junto al Palau de la Generalitat, motivó el traslado a la plaza del Ayuntamiento, entonces llamada de Isabel II.

Los trabajos consisten en la restauración de la parte superior de la torre y en la fijación de las gárgolas. Las mismas fuentes municipales confirmaron los desperfectos en las torres se encontraron antes de Navidad y no en las inspecciones a las que se someten los edificios de la plaza antes del comienzo de las «mascletades». Cabe recordar que el pasado año, estas inspecciones desvelaron que la estatua de Francesc de Vinatea, situada en el extremo norte de la plaza, se había movido dos centímetros en su pedestal, por lo que se actuó en ella para volver a centrarla.