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Salas revestidas con azulejos procedentes de antiguos conventos

En las restauraciones se aprovecharon fondos de los depósitos municipales para ennoblecer la residencia

La «Casa Forestal» no es un edificio catalogado por su arquitectura, pero cuenta en su exterior e interior con interesantes paneles cerámicos, algunos datados en el siglo XVIII, procedentes de antiguos conventos y pertenecientes a los fondos históricos municipales, que se habrían colocado allí durante alguna de las reformas efectuadas para ennoblecer la casa. En este sentido destaca por su valor un retablo cerámico con el anagrama del nombre de María y símbolos de la virgen formado por 20 azulejos. Se trata de la «Alegoría de la Pureza», datada en 1780, y está situada en la fachada izquierda, a 2,5 metros del suelo, junto a la puerta de entrada al edificio.

Además, hay un panel de 35 azulejos de finales del siglo XVIII representando el paño de la Verónica con la cara de Cristo, así como una placa de dirección de calle con tartana y caballería en cerámica del siglo XIX.

Los maceteros de la fachada principal, recayente al patio y al antiguo jardín, están decorados con teámitca gótica (tipo «scals») y en ellos puede leerse «Devesa del rei», «partida del Arbre del Gos».

Todo el suelo de la «Casa Forestal» es de cerámica. En la entrada y en la cocina se alternan azulejos bizcochados con vidriados decorados.

Los zócalos de la entrada tienen el rodapié y el remate de azulejos tipo «mocadoret», en su mayoría imitación, pero también algunos del siglo XVIII. La parte central del friso está compuesta por azulejos con temas de flor de lis del siglo XVII y azulejos tipo «clavo» también del siglo XVII.

En la casa forestal hay dos cocinas, una que recrea un estancia antigua, con chimenea, cantarera y azulejos con diversas escenas valencianas obra de J. Gimeno, de Manises, que nunca se ha usado y otra moderna, que hizo construir la exalcaldesa Rita Barberá, para uso de los restauradores y empresas de catering con los que se contrataban los ágapes y que incluye un pequeño montacargas para subir los platos al comedor principal, ubicado en la primera planta. De J. Gimeno también son los azulejos de la escalera que accede al piso superior, así como un panel decorativo de una cacería de «collverts» en la Albufera.

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