El concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, aseguró ayer que la reordenación de la céntrica plaza de San Agustín será uno de los objetivos de esta legislatura. En concreto, la concejalía de Desarrollo Urbano, en colaboración con la de Movilidad, encargarán el año próximo la redacción del proyecto de remodelación que incluirá el traslado de las paradas de autobuses, que ocupan el espacio central de la plaza, para liberar todo este espacio público para el peatón. La idea será trasladar las paradas de autobuses a otros puntos como San Vicente y la calle San Pablo para que esta plaza, puerta de entrada a Ciutat Vella y destacada por su arquitectura racionalista, recupere esa condición. La previsión es que las obras arranquen en 2018.
Tanto la plaza de San Agustín, como la de la Reina y la plaza del Ayuntamiento son objetivos prioritarios para el gobierno tripartito (Compromís, PSPV y Valencia en Comú) que quieren recuperarlas como espacio público para los peatones. Así lo explicó el arquitecto y asesor de Alcaldía, Sandro Pons, el pasado jueves en el primer Debate de la Ciudad organizado por el Colegio de Arquitectos donde se incidió en que la necesidad de reformar las plazas y dotarlas de buenas accesibilidad.
Para liberar el espacio central de la plaza de San Agustín que ahora ocupan los autobuses el transporte público de entrada se desviará por la calle San Pablo hacia Marqués de Sotelo „liberando también Periodista Azzati„ mientras que la salida se haría por la calle Quevedo.
«Crear una verdadera plaza»
La remodelación de la plaza de San Agustín se inspirará en la propuesta presentada por los arquitectos valencianos de Zero Estudio. Esta propuesta, que se incluye dentro de un proyecto global de movilidad para Ciutat Vella, pasa por eliminar la playa de carriles bus y paradas, ganando todo ese espacio para el peatón y «creando una verdadera plaza», según explica su coordinador, Carlos Gómez.
La idea es dejar el espacio mínimo necesario para entrada y salida de vehículos a San Vicente y Barón de Carcer. La propuesta de Zero Estuidos plantea trasladar a estas zonas la paradas de gran capacidad para los autobuses. Se trata de un tipo de paradas largas en las que los autobuses van parando por orden de llegada, con lo que se ahorra mucho espacio. En relación al diseño de la nueva plaza, la citada propuesta planeta la posibilidad de colocar arbolado en las zonas que no recaigan sobre el aparcamiento subterráneo. Para ganar espacio verde, contando con las limitaciones del aparcamiento, los arquitectos proponen crear montículos con tierra cubiertos con vegetación donde los viandantes puedan sentarse y tomar el sol.
Esta intervención en la plaza de San Agustín se armonizará con la nueva fase de reurbanización de la calle San Agustín, otra de las vías donde se están aplicando los nuevos criterios de pacificación del tráfico.
