La empresa Emivasa, el Ayuntamiento de Valencia y la Fundación Aguas de Valencia han puesto en marcha este año un servicio de ayuda a las personas que no pueden pagar el recibo del agua. Y sólo en el primer mes se han apuntado 215 familias con 541 facturas impagadas. Para acceder a estas ayudas —el ayuntamiento paga los cánones y las tasas mientras que la fundación asume el consumo— es necesario acudir a los servicios sociales y que éstos, previa recogida de documentación, lo envíen a Emivasa, que inmediatamente suspende el corte del suministro y analiza el expediente, explico Miguel Andrés, responsable de operaciones. Si es correcto, se incorpora a una relación de clientes para sumir los costes.

Para el conjunto de los clientes, los beneficios, a falta de que la Emshi adopte medidas sobre el precio del agua, se basan fundamentalmente en la atención y forma de pago. Jaime Barba explicó que hay dos oficinas de información presencial y que todos los años se gestionan 750.000 incidencias, de las cuales un 50% se hacen por teléfono. También se han implementado nuevos sistemas de pago. j. parrilla valencia