La Marina Real Juan Carlos I de Valencia, bajo la nueva dirección de Vicent Llorens, tiene previsto acabar con su "déficit operativo" en los próximos dos años y equilibrar así la diferencia entre los 7 millones de euros de gastos de explotación y los 4,5 millones de ingresos que tiene.
Así lo ha indicado el propio Llorens en su primera comparecencia pública tras ser nombrado director gerente del Consorcio Valencia 2007, en la que ha asegurado que el objetivo "no es ganar dinero" sino "tener tesorería para financiar inversiones" y ha apostado por "mejorar la gestión de los ingresos".
Llorens ha realizado estas manifestaciones a los periodistas tras la rueda de prensa que ha ofrecido hoy junto los representantes de las tres Administraciones que integran el Consorcio: el alcalde de Valencia, Joan Ribó, el conseller de Hacienda, Vicent Soler, y el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues.
"En dos años la Marina irá a tope", ha asegurado Llorens, quien en su comparecencia ha evitado concretar asuntos sobre la deuda que tiene la entidad y que ha cifrado en torno a los 440 millones de euros.
No obstante, ha manifestado que esa deuda tiene "muchas aproximaciones": una deuda inmediata (7 millones con el banco Santander), una deuda financiera por los productos que se "obligó" a contratar cuando se concertó el préstamo con el ICO y el propio préstamo del ICO.
"Hemos de hacer una aproximación rigurosa a la situación financiera de la Marina, a los contratos vigentes y a los que se concertaron en su momento y tener clara su legalidad", ha añadido Llorens, quien ha insistido en que "hay muchas cosas que hablar" al respecto de la deuda y los contratos.
Llorens ha asegurado que no querría hablar hasta no conocer toda la información de los técnicos del Ayuntamiento y la Conselleria, la Intervención General del Estado y la Abogacía del Estado.
