Terrazas abarrotadas, música a todo volumen y un cielo plagado de ¿dragones? No cabía ni un alfiler en el paseo marítimo a causa del XIX Festival de Viento «Ciudad de Valencia» que, desde ayer, ha sido la principal atracción en la playa de la Malva-rosa.

El evento, patrocinado entre otros por Levante-EMV, reunió a más de 120 pilotos y turistas de Nueva Zelanda, Italia, España, Alemania o Bélgica, entre otros, con cometas de lo más variopintas: desde las clásicas en forma de rombo hasta estrambóticos volantines de tiburones, leones y peces de colores.

Se trata de un espectáculo totalmente gratuito y que parece que entusiasma no solo a niños, sino a muchos adultos que se entrenan durante semanas para este festival, el más importante de España y que además, es reconocido a nivel internacional.

«Llevamos mucho tiempo esperando a que llegue este día», dijo Javier Garrido, que vino con toda su familia desde Gandia y que lleva compitiendo en la categoría de «freestyle» doce años. «Casi lo disfrutamos más los mayores que los niños, es una gran oportunidad para estar en familia y pasar el resto del día en Valencia» añadió. Entre otros pilotos se encontraba el campeón del mundo de esta especialidad, Richard Debray, cuya actuación fue muy aplaudida. Una de las exhibiciones más comentadas fue la de una pareja francesa, que transformaba sus cometas en cubiertos que daban de comer a una sorprendida audiencia.

No obstante, los espectadores veteranos coincidían en que se echaban de menos las enormes cometas de animales que pudieron verse el año pasado. «En la edición anterior vimos animales realmente gigantes. Este año no han aparecido, o al menos ha habido muchas menos y eso se ha notado» comentaba el vecino de la zona, Julián C.

Diversas lipotimias

Aun así, el día no estuvo exento de problemas pues en la Posta Sanitaria informaban que atendieron a varias personas por lipotimias. «El viento no ha sido suficientemente fresco hacia el mediodía. Siempre recomendamos que usen gorras, pero con el plantón es normal desmayarse», explicó una de las voluntarias.

La zona de celebración de este icónico festival está ubicada en el Paseo Marítimo entre las calles Pintor Ferrandis y la avenida del Mediterráneo. La actividad se prolongará durante todo el domingo hasta bien entrada la tarde, culminando así dos días de acrobacias aéreas que son referente a nivel mundial.