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Tu verdad

Tu verdad

Qué difícil resulta discernir entre razón y sentimiento. Sentimientos encontrados, manipulados, llevados al terreno propio con esa altanería que parece, a veces, otorgar el Poder de cualquier ideología de cualquier religión.He salido a la calle. Cruces de mayo, esculturas de flor y perfume, inundan la ciudad y los turistas, admirados, se detienen ante ellas€ No entiendo muy bien por qué el Alcalde, «alcalde de todos los valencianos» (así se manifestó,) le ha dado como «un pronto» y ha decidido no instalarla en la puerta del Ayuntamiento€ Tengo respeto y simpatías por este Alcalde, sencillo, sonriente, que va en bicicleta. Temo a esos partidos incipientes cargados de prejuicios y cualquier signo que les parezca religioso: ¡anatema! Me recuerdan a las religiones intransigentes poseedoras de razón€ Parte de culpa la tiene alguna derecha que, a veces, se apropia de tradiciones, sobre todo si son religiosas, aunque no sean creyentes. Las cruces de Mayo era una fiesta pagana, anterior a la cristiandad; se celebraba en el creciente apogeo de la primavera. Se rendía culto a la naturaleza, se adornaban árboles, bailaban danzas rituales y cantaban€ pero la Iglesia, siempre buscando adeptos a la fe, remplazo el tótem por la cruz y le dio una visión cristiana y milagrosa. El Rector del Patriarca prohíbe la «danza de los seis» y la Iglesia se apropió de las figuras paganas de la procesión del Corpus Cristi€ Estoy en la línea del artículo del director Julio Monreal, cuando se refiere a esas personas alejadas de la religión y el día del traslado, con el alba, llegan para coger sitio: se emocionan y piropean a la Virgen tambaleante, algunos acercan a sus asustados hijos para que la toquen€ Espectáculo trepidante al que nunca he podido acostumbrarme. Y es que el populismo camina en cualquier sentido.Vivimos en un país lleno de leyendas y tradiciones que se entremezclan con el sentido religioso y la costumbre. Los dirigentes, no deben asistir solo «a título personal» porque se les invita en función del cargo que ostentan y si tienen que presidir un acto... La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, como es fallera no tuvo ningún reparo en ir a la ofrenda de flores, (en la ofrenda siempre se va a título personal) ella, luego, hacia broma: «como iba sin gafas no me conocía nadie» (¿?)El querido viejo profesor, Tierno Galván dijo una vez: «La separación Iglesia/Estado es totalmente necesaria. La Iglesia, al igual que la gente, conoce quién soy y cómo pienso; pero soy alcalde de todos los madrileños y aunque tenga distinta ideología y sea agnóstico, les debo mi respeto». Recibió al Papa y le habló en latín, decidió también mantener un crucifijo que encontró en su mesa de despacho porque lo vio como signo de amor y fraternidad y por respeto a quién se lo había dejado.He leído que el Alcalde delegó unos días las funciones del Ayuntamiento en el concejal Grezzi. (Y yo sin enviarle un libro de poemas.) Tenía por delante seis tenientes de alcalde y no le tocaba. Tendrá que llevar el DNI y permiso de residencia para entrar en el Ayuntamiento. Y dice Machado: ¿Tú verdad? no, la verdad; / y ven conmigo a buscarla. / La tuya, guárdatela.

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