El Ayuntamiento de Valencia prohibirá el «bou embolat», como ya anunció el alcalde Joan Ribó, pero mantendrá los «bous al carrer» en los pueblos de la ciudad. Los tres grupos políticos que forman el tripartito, Compromís, PSPV y València en Comú, pactaron ayer llevar adelante una moción del equipo de gobierno. El consenso no ha sido fácil, pues los alcaldes pedáneos habían pedido al consistorio que no eliminara el «bou embolat» de los festejos taurinos, una opinión compartida desde la Concejalía de Pedanías y los concejales socialistas que, finalmente, han cedido ante la opción animalista del gobierno local.

Habrá bous al carrer, pero sin embargo se prohíbe el «bou embolat» de cara a los festejos del próximo verano en las pedanías cuando muchas de las peñas ya tenían comprometido su presupuesto con los diferentes ganaderos. El acuerdo político se ha alcanzado sin que el ayuntamiento haya abierto un proceso de consulta ciudadana, algo que reclamaban aquellos sectores que defienden la celebración de estos festejos.

La decisión de tripartito se produce justo antes de comenzar la temporada de festejos en los pueblos de la ciudad afectados (Massarrojos, Benifaraig, Carpesa y Borbotó) y se da la circunstancia de que la decisión no se adoptó en la pasada feria de Fallas, donde el Ayuntamiento autorizó la celebración de bous al carrer y bou embolat en la plaza de toros.

El lunes de la semana pasada ya se celebró una reunión de pedáneos en la que el alcalde, Joan Ribó, y la concejala de Bienestar Animal, Gloria Tello, plantearon la prohibición del «bou embolat» en las pedanías donde se celebra. Y ya en ese encuentro los alcaldes pedáneos manifestaron su disconformidad con la medida y advirtieron de que las peñas también se oponen. Es más, se mostraron dispuestas a movilizarse en sus pueblos e incluso en otros lugares como la pedanía de Castellar o el barrio de Campanar donde han desaparecido estos festejos pero sigue quedando un poso taurino.

Ante este desencuentro, los pedáneos y los representantes municipales se emplazaron a una nueva reunión, la de ayer, en la que estuviera presente la concejala de Pedanías, Consol Castillo. El Partido Socialista, socio del Gobierno municipal, siempre se había mostrado en contra de la prohibición, recordando que la medida no figuraba en los acuerdos firmados en La Nau, que dieron pie al actual gobierno municipal. Pese a todas las diferencias, el «bou embolat» parece que ya es historia en las pedanías.