Esta mañana han comenzado las obras de rehabilitación de la fachada del edificio principal de Correos de Valencia. Esta actuación devolverá el esplendor a la fachada de este emblemático edificio.

El edificio dispone de tres fachadas en las calles Correos, Roger de Lauria y Plaza del Ayuntamiento con una superficie cercana a los 2.700 metros cuadrados. Las fachadas fueron construidas con bloques de piedra de Novelda, salvo los zócalos del edificio que están realizados con piedra caliza de Borriol. Además, los alzados también cuentan con otros elementos decorativos de mármol de Carrara, los buzones de león y otros elementos escultóricos y ornamentales como los templetes forrados de zinc que coronan las esquinas del edificio.

Todos estos elementos van a ser rehabilitados gracias a una limpieza general y a la reparación de los desperfectos y patologías producidos desde la última rehabilitación integral del edificio. Además se instalarán unas nuevas láminas de cinc horizontales en las cornisas para evitar las escorrentías verticales y se barnizará toda la carpintería exterior del inmueble.

Las obras van a ser ejecutadas por la empresa Grupo Bertolín que fue la adjudicataria del concurso que convocó en 2015 la empresa postal para acometer esta rehabilitación y su plazo de ejecución será de dos meses.

La construcción de este edificio comenzó en 1915 y finalizó en 1922, aunque la inauguración oficial no se produjo hasta 1923. Los gobiernos de principios del siglo XX impulsaron planes para construir «Casas de Correos» adaptadas a las necesidades de entonces en casi todas las capitales de provincias. Estos edificios debían representar por un parte, la solidez del poder público y, por otra, la rapidez y eficacia de las comunicaciones postales en aquellas primeras décadas del siglo XX.

El edificio de Valencia fue proyectado y diseñado por el arquitecto zaragozano, Miguel Angel Navarro Pérez. La arquitectura del edificio se puede incluir en el Modernismo Valenciano, aunque tardío, heredado de la época de las exposiciones y los mercados de finales del siglo XIX.

Las esculturas del tímpano del arco de la fachada principal representan los cinco continentes y las de los remates que flanquean el reloj muestran tríos de ángeles portando cartas y símbolos telegráficos (rayos), junto a un navío (derecha) y una locomotora de tren (izquierda), representando las comunicaciones por tierra y mar. El edificio actual está coronado por una torre metálica con un globo terráqueo, reconstrucción de la original, que fue repuesta en la última rehabilitación integral del edificio.

Este inmueble ha acogido varias reformas. Las más recientes datan de 1996 „obras menores en todas las plantas„; 1999 „restauración de la cúpula, vidriera y rosetón central„ y, por último, la rehabilitación integral que comenzó en 2002 y finalizó en 2004 y que dejó el edificio en el estado actual.

Precisamente, coincide el comienzo de esta rehabilitación con el 300 aniversario de Correos, que se conmemora el día 8 de julio. Con la celebración de este aniversario la entidad quiere dar a conocer su contribución como factor de impulso y desarrollo de la sociedad española y como elemento de vertebración territorial y de cohesión social.