­La regeneración del barrio del Cabanyal recibió ayer un impulso definitivo por parte de la Generalitat Valenciana del Ayuntamiento de Valencia. Tras las críticas vecinales recibidas por el retraso en la anunciada revitalización del barrio después de la suspensión del plan de la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez, el Consell aprobó ayer la derogación definitiva del Pepri del Cabanyal impulsado en 2001 por el gobierno de Rita Barberá. Al mismo tiempo que dio luz verde a las normas urbanísticas transitorias que sacarán del limbo urbanístico al barrio y permitirán a los particulares empezar a pedir licencias de obras. También ayer, el ayuntamiento aprobó las bases que regulan la solicitud de subvenciones vinculadas al Plan de Vivienda del Ministerio de Fomento y al convenio para la renovación urbana (ARRU) del Cabanyal, que supondrá una inversión público-privada de 12,7 millones de euros.

Hasta la aprobación definitiva y entrada en vigor del nuevo Plan Especial de Protección de Conjunto Histórico, se mantendrá únicamente la catalogación y régimen de intervención de aquellos inmuebles protegidos ex novo por el PEPRI y que no figuraban incluidos en el catálogo del PGOU de 1988, informaba ayer la vicepresidenta del Gobierno valenciano, Mónica Oltra, tras el pleno del Consell celebrado en Torrevieja.

El consistorio ha recibido ya la inversión del Ministerio de Fomento y la Generalitat que este año aportarán 4,3 millones y 373.000, respectivamente. Ayer la junta de gobierno local aprobó una modificación de créditos para contabilizar el ingreso que ya han efectuado ambas administraciones. El ayuntamiento es el depositario y administrador de las ayudas transferidas por Fomento y por la Generalitat. El ayuntamiento subvencionará el plan con 2,5 millones de euros y la inversión privada ascenderá a 4,6 millones. Se rehabilitarán 250 viviendas y reedificarán otras 50.

El Consell aprobó formalmente ayer la suspensión del Pepri del Cabanyal por determinar la expoliación del conjunto histórico del Cabanyal y de conformidad con la Orden del Ministerio de Cultura de 2009 y de acuerdo con la Ley valenciana de Ordenación del Territorio. Así lo explicó ayer la vicepresidenta, Mónica Oltra, en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell, donde precisó que se mantiene la vigencia, por razones urbanísticas y sociales, de la delimitación, ordenación y régimen urbanístico de determinados ámbitos de actuación del PEPRI que amparan actuaciones básicamente de reequipamiento dotacional.

La junta de Gobierno aprobó ayer las bases para subvencionar las rehabilitaciones en el Cabanyal de acuerdo al plan del ministerio de Fomento y al ARRU. El concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Vicent Sarrià, explicó ayer que la Sociedad Plan Cabanyal, la entidad que tramitará las ayudas, ya tiene hecha una preselección de las solicitudes presentadas. Sarrià explicó que con la entrada en vigor de las normas urbanísticas, las «licencias para la rehabilitación se incrementarán de forma sustancial».

De esta manera, el Ayuntamiento de Valencia «da un paso más en su compromiso con la rehabilitación del barrio del Cabanyal-Canyamelar, que arrancó al inicio de la legislatura con la derogación del PEPRI que pretendía dividir en dos el barrio y destruir la trama histórica», apuntaba la concejala de Vivienda, María Oliver, quien destacaba la importancia «de regenerar las viviendas y edificios del barrio». Además, estas ayuda permitirán recuperar el patrimonio local.