La Batalla de Flores del 125 aniversario tendrá como principal novedad que el recorrido será más largo (entre 75 y cien metros) para poder incluir más palcos (un total de cien) y así tratar de responder a la demanda que, en teoría, existe para participar en un festejo en el que el espectador también es actor del mismo a base de lanzar los clavellones hacia los ocupantes de las carrozas, participantes principalmente femeninas. El número total de personas que podrán ocupar estos recintos será de 2.712.

En total serán 377 los palcos de seis personas que se pondrán a la venta, a un precio de 30 euros (cinco por persona). La venta de los mismos será on-line en dos tandas: 19 y 26 de julio, a las diez de la mañana a través de la empresa que gestiona la venta, Spaintastic, pero también la web municipal y la de la Gran Fira. Cada DNI sólo podrá adquirir un palco.

Las colas a la puerta de Viveros se han convertido ya en una liturgia incluso exagerada (cuando acabó la cola el año pasado todavía quedaban palcos por vender). Para ellos habrá 57 palcos más.

La comitiva está compuesta por 32 carrozas (29 del ayuntamiento, una de la Diputación y dos de fallas de l´Horta Sud), más tres landós y seis coches ligeros. Para las falleras preseleccionadas habrá una carroza más para evitar así la masificación de las mismas.

Entre las entidades que participarán estarán, aparte de las 144 preseleccionadas, representantes del mundo de las fallas y otros colectivos festivos y culturales, incorporándose este año el Consell de la Joventut de la Ciutat de València.

Este año, además, LevanteTV ofrecerá en directo el festejo, que comenzará a las ocho de la tarde del 31 de julio, con el que finalizarán los festejos de la Gran Fira de València.

El concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, aprovechó para felicitarse por el desarrollo de la Fira tras celebrarse el primer tercio del mismo. «Sobre todo, hemos conseguido que la Fira alcance no sólo a todos los barrios, sino a todas las personas. Hemos conseguido un programa variado, para todos los públicos». Y no dejó escapar la oportunidad para lanzar más de dardo al anterior equipo: «lo que se está demostrando es que el anterior ayuntamiento tomaba la Fira como una rutina, sin ponerle ningún interés. Era un trámite que había que pasar cuando, si se quiere y se pone interés, se puede hacer un gran programa para toda la ciudadanía y con proyección turística». De la Batalla de Flores, otro dardo: «ya el año pasado liberamos la gran cantidad de palcos que se repartían entre amigos y conocidos de la ex alcaldesa».

Del aumento del recorrido de la Alameda aseguró que «si vemos que se hace necesario, quedará ampliado de forma permanente. Dependerá de la demanda del público»