El Ayuntamiento de Valencia estudia implementar medidas para reducir el número de niños perdidos en las playas, que este año ha pasado de 80 a 95, según explicó ayer la concejala de Protección Ciudadana, Sandra Gómez, durante su evaluación del Servicio de Playas. Entre las ideas que se barajan, se estudia el reparto de «pulseras identificativas» con un teléfono de contacto que se entregarían a los niños de corta edad cuando accedieran a la zona de baño.

Este procedimiento tiene como objetivo evitar que tanto mayores como menores pasen «un mal rato». «Obviamente, la policía está ahí para solucionar el problema», agregó, «pero queremos que no se origine de cara al año que viene».

Mientras hacía balance, Gómez consideró «muy importante» la bajada de infracciones por «mal estacionamiento» y destacó la situación de las pedanías del sur, donde se han reducido un 73%. Este hecho se debe al emplazamiento de «zonas de estacionamiento y de aparcamiento específicas», la mejora de la señalización y el refuerzo de la presencia de la Policía Local.

«En muchas ocasiones», indicó, los vehículos incorrectamente estacionados «bloqueaban el acceso de los bomberos a los viales» de emergencia en el caso de que hubiera incendios en la Devesa. Se trata de «una de las mayores reivindicaciones» del Servicio de Bomberos, destacó, y se ha coordinado con la Policía Local.

Asimismo, la regidora subrayó los esfuerzos de las fuerzas de seguridad municipales por «minimizar» todo lo posible la venta ambulante y el «top manta», algo que era «muy habitual» en el Paseo Marítimo durante el verano. En total, se han levantado 126 actas y se ha producido «un decomiso de 400 unidades de ropa, zapatillas» y otras falsificaciones, además de «619 kilos de venta de alimentos perecederos que también se vendían sin autorización».

La Policía Local «ha hecho una labor de servicios humanitarios muy destacable», subrayó la edil al señalar las 166 asistencias que han realizado en la playa de la Malva-rosa y las 38 que han tenido lugar en las playas del sur.

Novedad de este año

La regidora Gómez destacó «la principal novedad del Servicio de Playas» de este año, que radica en que, «por primera vez», el Retén de Playas recoge y tramita denuncias por «cualquier tipo de incidente» que pueda ser «constitutivo de un delito» o una falta gracias a un acuerdo que se alcanzó con la Policía Nacional.

Se han tramitado «más de 40 denuncias, lo que significa que tomamos una buena decisión», defendió. «40 ciudadanos sintieron que el Ayuntamiento les atendía directamente en el sitio donde habían sufrido el percance».