«Nos propusimos traer una falla al desierto y "Renaixement" ya está en pie. Ahora toca vivir esta locura que está por empezar». Con este mensaje, el artista fallero David Moreno comunicaba el final de la «plantà» de la obra que, en representación de las fallas de Valencia, estará expuesta en mitad de la nada, en el desierto de Nevada, durante toda una semana, dentro del festival de arte efímero Burning Man. Es el resultado del contacto mantenido por los autores de la última falla de Nou Campanar con los responsables del evento, que visitaron Valencia el pasado mes de marzo y que han becado el proyecto.
El festival artístico reúne este año trabajos combustibles „realizados con materiales ecológicamente sostenibles, como madera y cartón„ dedicados a Leonardo da Vinci. El proyecto, que está formado por grandes tubos de cartón y que incluye tanto mosaicos inspirados en Nolla como caras de ninots rescatados de talleres de los artistas falleros, ha sorteado tormentas de arena y grandes inclemencias meteorológicas, incluyendo un tifón, antes de poderse acabar.
