Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Valencia (PP y Ciudadanos) criticaron la gestión del Govern de la Nau por los, a su juicio, pobres resultados cosechados en este primer año de gestión. El tripartito se defendió de las acusaciones de «división» y «enchufismo» que centraron parte de las intervenciones de populares y Ciudadanos.

El portavoz del PP, Eusebio Monzó, señaló la «falta de coordinación» del gobierno municipal, donde «existen tres voces distintas», y «luchas de poder» que han quedado en evidencia en la elaboración de los presupuestos, en la subida del IBI y en el reparto de competencias tras la marcha del socialista Joan Calabuig. Acusó a València en Comú de contratar empresas afines para los procesos de participación ciudadana y a Compromís de las «prisas por peatonalizar el centro».

Para el portavoz de Cs, Fernando Giner, la política económica del tripartito se ha caracterizado por el «continuismo, la decepción y los incumplimientos» y apuntó que la ciudad «idílica» que describe el alcalde no se corresponde con la realidad y recordó que en el último año se han producido al menos 16 movilizaciones en los barrios por suciedad, malos olores, terrazas y apartamentos ilegales, botellón y ruido

Desempleo e impuestos al comercio al alza, falta de un modelo de gestión turística estratégica y grandes infraestructuras atascadas son algunos de los problema señalados por Ciudadanos que advirtió de que el tripartito está transformando a Valencia en una ciudad «de tercera» y con un turismo «low cost».

Giner Reprochó a Ribó su «falta de liderazgo» y dijo que el equipo de gobierno «comete los mismos errores» de «enchufismo» y «falta de transparencia» que reprochaban al PP cuando gobernaban.

«Nos pondremos las pilas»

El gobierno de la Nau, por sulado, agradeció las críticas «constructivas» de las entidades ciudadanas y se comprometió a «ponerse las pilas», en palabras del portavoz de Compromís Pere Fuset, quien pidió a la oposición que deje de «proclamar el apocalipsis» permanentemente.

El portavoz de Valencia en Comú, Jordi Peris, justificó en el turno de replica la externalización de algunos contratos por la falta de personal municipal y admitió que el nuevo reglamento de participación ciudadana debe ser vinculante, como pide la Federación de Asociaciones de Vecinos. La portavoz socialista, Sandra Gómez, por su parte, replicó a Giner que el gasto medio del turista había subido un 20% en el último año, al tiempo que recriminó al PP el abandono del Cabanyal y la deuda de la marina Juan Carlos I comprometiéndose a sacar todo el potencial a la ciudad.