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Entrevista

Glòria Tello: "Si por mí fuera, quitaba las corridas de toros mañana mismo"

La primera concejala de Bienestar Animal de la ciudad de Valencia quiere sentar las bases para que en el futuro desaparezca el maltrato a los animales

Glòria Tello: "Si por mí fuera, quitaba las corridas de toros mañana mismo"

Glòria Tello (Valencia-1978) es socióloga, activista vecinal y la primera concejala de Bienestar Animal de Valencia. Lo es porque siempre ha sido una defensora de los animales, implicada directamente en la protección de las colonias felinas, y porque en Compromís han creído siempre en su trabajo. Y aunque su labor ha chocado tanto con los taurinos como con los animalistas, está dispuesta a sentar las bases de la protección animal en esta ciudad. No será prohibicionista, pero sí muy dura con el maltrato.

Por lo que me ha contado, amiga de los animales desde siempre.

Desde siempre, sí. Cuando era pequeña me gustaba ir al pueblo porque mi vecino tenía un caballo. También tenía animales en casa, hemos tenido de todo. Y siempre he tenido mucho interés por su protección. He sido socia de la protectora (Svpap) y empecé a cuidar una colonia de gatos que había detrás de mi casa. Soy un poco «friki» de los animales (ríe). Tengo cuatro gatos.

Esta concejalía es entonces un regalo desde el punto de vista personal.

Sí, sí, sí. En Compromís yo ya trabajaba mucho en este tema e hice el programa electoral para Valencia en este campo. Entonces, cuando conseguimos representación dije: ¿Y si hacemos la concejalía? Porque esto era visto como un problema.

En la política clásica se cuestionan este tipo de concejalías porque parecen más una pose que una necesidad real.

Yo no estoy de acuerdo. Yo pienso que las sociedades avanzan, que cada vez hay una mayor concienciación. Y si consideramos esta concejalía una pose, por esa misma regla de tres tenemos que considerar una pose tantas otras cosas que hace muchos años nos hicieron avanzar.

¿Por qué habéis chocado entonces con los partidos animalistas? El otro día hubo una protesta por las colonias felinas.

Sólo ha sido con el Partido Animalista. Yo creo que es que le quitamos votos. Cuando llegamos a la concejalía, una de las primeras reuniones fue con Pacma y les dije que me gustaría hacer un equipo y que colaboráramos todos. Pero en aquella reunión llegó un momento en que la portavoz adoptó una actitud inquisidora y les dije que si iban a utilizar nuestras colaboraciones para criticar todo lo que no iba lo rápido que ellos querían, había dos caminos: tender lazos y hacer un recorrido conjunto o seguir la estrategia y el juego político. Y el futuro ha demostrado qué camino han querido elegir.

El rifirrafe viene por las colonia de gatos, por la protección de las amenazadas y por la esterilización ¿Eso cómo se está resolviendo?

Este año se ha implantado el plan felino porque entiendo que los gatos son necesarios por la salud de la ciudad. Y dentro de este plan hay un plan de esterilización, que consiste en operar a las gatas para evitar que las poblaciones proliferen descontroladamente y para que estas colonias tengan calidad de vida. Empezamos en julio con un presupuesto de 22.000 euros. Y además hemos hecho un convenio con el Colegio de Veterinarios para tener 12 clínicas en toda la ciudad y que todo vaya más rápido. Todo esto, además, reconociendo a las personas colaboradoras y dándoles un carné, porque había problemas con policías y vecinos e incluso denuncias.

Precisamente, eso era lo que Pacma decía que no se estaba haciendo. Y temían por una colonia que estaba en un solar que se iba a construir.

Esos argumentos se los han sacado de la manga. Pacma no nos ha preguntado qué estamos haciendo y ha entrado el interés político. Llevamos meses hablando con la persona de la colonia de Russafa, que ha sido el detonante, y aparte de eso hemos hablado con la propietaria del solar y nos ha dicho que eso de que se va a edificar ya no es verdad. A día de hoy ni siquiera ha vendido el solar. Así que yo haré una reunión con todos los cuidadores en enero y ahí lo hablaremos todo.

¿Lo de la colonia de Russafa está solucionado entonces?

Yo he hablado con todos para que no haya problemas y además he pedido que me adscriban un solar que está entre la Avenida del Puerto y la Avenida de Aragón para que sea un sitio transitorio cuando alguna colonia esté en riesgo, para tenerlos allí hasta que se puedan redistribuir en otras. Y eso es lo que hemos hecho desde la concejalía, lo que pasa es que ni Pacma nos ha preguntado ni ha habido voluntad de colaboración.

Con su llegada al gobierno se acabó con los animales en los circos y se prohibió el toro embolado... Por cierto, ¿eso ya está superado, no?

Bueno, parece que sí. Hasta ahora ha sido la decisión más complicada, pero yo creo que era necesario y la gente lo ha entendido.

Lo que le decía... Esta legislatura se declaró a Valencia Ciudad libre de maltrato animal. La pregunta es: ¿Y la corridas de toros para cuándo?

Bueno, ahí entran en juego dos factores. El principal es que no tengo capacidad de intervenir en eso porque el ayuntamiento no tiene ninguna competencia. Es la Diputación. Si por mí fuera, los quitaría ya, habría sido de las primeras cosas. Pero además entiendo que en estos temas al final es más práctico hacer hincapié en la pedagogía e intentar convencer a la población de que nosotros, como sociedad, vamos avanzando y el maltrato y las torturas a los animales deberían formar parte del pasado. Yo lo prohibiría ya, pero creo que los toros tienen que ir muriendo solos, que llegue el momento que no vaya nadie.

Usted se encuentra también con la circunstancia de que gobierna en coalición y que en la Diputación hay un diputado socialista responsable de estos asuntos que es claramente taurino. ¿Eso frena también?

Bueno. Es cierto que no tenemos exactamente la misma visión en este tema los miembros del gobierno autonómico, provincial y local. Entonces eso también es un plus, pero en general tenemos buena entente. Al menos en el ayuntamiento, sí. Aquí tenemos a Ramón (Ramón Vilar, concejal socialista), que es muy taurino, y es de los concejales con los que mejor me llevo. Yo lo intento concienciar, él me intenta pinchar, me enseña libros de toros y toreros, y así vamos. Bien (ríe).

Para ponerle marco a todo esto, el ayuntamiento anunció una ordenanza sobre animales que aún no ha salido. ¿Cómo está ese asunto?

Esta ordenanza la hemos querido consensuar con todos los agentes implicados y ya tenemos consensuado el texto. Yo creo que este año 2016 podrá iniciarse el trámite administrativo. También quiero consensuarla con los partidos de la oposición. Y yo creo que para el año que viene podremos aprobarla. Para mí es importante que sea una ordenanza consensuada y que si un día yo dejo de ser concejala de Bienestar Animal, que sea lo suficientemente fuerte para que no la puedan tumbar a la primera de cambio.

¿Será una ordenanza prohibicionista? ¿Alguien tiene que tener miedo?

Yo creo que miedo no. Aunque hay gente que pueda pensarlo, yo creo que no nos basamos en prohibir. La pedagogía es mucho más productiva al final. Lo que sí quiero es que esta ordenanza sea ejemplar, de las mejores de todas las que se están elaborando. Y queremos que las sanciones que se recojan sean las máximas posibles. Pensamos que es necesario para visualizar que maltratar a un animal, apalearle, pegarle o tener un perro atado todo el día en un balcón no está bien. La ley no tiene por qué trivializar eso.

Un ejemplo. ¿El tiro y arrastre se verá afectado?

Nosotros ahora mismo no vamos a entrar en eso. El tiro y arrastre entendemos que a la larga tiene que dejarse de hacerse, al menos como se está haciendo ahora, porque es una manera que provoca muchas lesiones a los caballos, lo que equivale a la pena de muerte. Pero en este asunto entendemos que es mucho más conveniente reforzar pedagógicamente la protección animal y que poco a poco la sociedad vaya interiorizando este parecer.

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