Un grupo de estudiantes de arquitectura de la Universidad CEU Cardenal Herrera (CEU-UCH) presenta hoy en la antigua base del Alinghi, a las 16 horas, su propuesta de rediseño del espacio urbano de la Marina Real Juan Carlos I de Valencia. La iniciativa plantea la recuperación de un tramo de cantil con bancos bajo el lema «¿Has visto la puesta de sol en La Marina? ¡No te la pierdas! Ahora te espera un ´embarcadero´ denominado #miramarina».

Los alumnos, después de haber realizado un mapeo colaborativo a través de una recogida de opiniones previa, elaboraron junto a otros estudiantes y arquitectos profesionales una selección de cuatro líneas de intervención de entre las que se ha ejecutado la denominada «Cabos sueltos». José Luis Gisbert, profesor de Urbanismo de la CEU-UCH, ha explicado que «esta acción ilustra una posible estrategia, a desarrollar aún más en el futuro, que consiste en enlazar ´cabos sueltos´, a modo de recorridos por la Marina, mediante líneas dibujadas en el pavimento que guíen al transeúnte».

La iniciativa incorpora la propuesta de estudiantes de la CEU-UCH, la cual consiste en la recuperación de un tramo de cantil, en el que se dibujan tres pantalanes a los que se amarran bancos para sentarse a modo de «embarcadero» y que han llamado «#miramarina». Gisbert ha señalado que, «de esta forma, se recupera y habilita un área que permite disfrutar del sol y de las vistas en la Marina».

La opinión de los vecinos

Durante diez días, los estudiantes participaron previamente en el taller «#caminamarina», donde evaluaron el estado actual de la Marina acompañados de arquitectos y alumnos de otras universidades valencianas. Esta actividad, organizada por la asociación sin ánimo de lucro Arquitectura durante noviembre en el antiguo hangar del Alinghi, permitió a los estudiantes de la CEU-UCH conocer los puntos de vista de vecinos, empresarios con actividad en la zona y del Consorcio València 2007 que han participado en esta iniciativa del Civic Factory Fest, organizada por Civicwise. La acción invitó a todos los interesados a responder a una pregunta acerca de cómo querían que fuera el espacio que ocupa la Marina Real.

Mientras duró el taller, los estudiantes trazaron con pinturas el cabo y los pantalanes que componen su propuesta. El Consorcio Valencia 2007 instaló los bancos de su «embarcadero», de manera que completó la adecuación del espacio urbano, que ya pueden visitar todos los valencianos.