Una cuarta parte del anillo ciclista, el que corresponde al tramos de Guillem de Castro, estará terminado antes del inicio de la Navidad, cuando las obras que está llevando a cabo Pavasal se tomarán un respiro para no perjudicar a los comercios del centro histórico y los días de fiesta.

Ha pasado justo un mes y un día desde que se inició esta infraestructura clave para los usuarios de las bicicletas y que conectará en el futuro con parte de la red ciclista que ya está construida „como los carriles de Padre Ferris o Almassora„ y con la que está previsto que se construya pronto, como el tramo de la avenida del Cid y la calle San Vicente.

Las obras del tramo de Guillem de Castro se han hecho a un ritmo realmente y dejan entrever cómo quedará la ronda interior. Algunas zonas, como la que se inicia en la calle del Hospital, el aparcamiento de coches ha desaparecido porque ya no cabía, pero se ha creado un gran número de plazas de motos que descongestionarán las aceras.

Hasta el Pont de les Arts, la ronda contará con dos carriles para el tráfico privado y uno para EMT/taxi, además del carril bici de 2,5 metros de ancho y, donde es posible por la amplitud de la calle, plazas de aparcamiento.

A la altura de la calle Padre Manjón se ha creado una nueva regulación semafórica que además servirá para mejorar la seguridad del colegio público Cervantes.

Paralelamente se está finalizando también tramo de la plaza Tetuán, que comprende desde la marginal derecha del viejo cauce, a la altura del Puente de Real, hasta la calle de la Paz. Está previsto que hoy se acaben los trabajos que han sido complejos porque han incluido la creación de una nueva isleta y el futuro intercambiador de la EMT.