El Govern de la Nau ya tiene el borrador del plan de armonización y homologación de las fundaciones municipales y organismos periféricos, que entre otras medidas contempla la limitación y unificación de la remuneración de los gerentes y directivos de los organismos públicos, desde el Palau de la Música, hasta el de Congresos pasando por la EMT, Aumsa o Inndea, así como la elaboración de auditorias operativas anuales para garantizar una «gestión eficiente de los recursos públicos». Los gerentes de las fundaciones no podrán cobrar más que el alcalde, como ha estado ocurriendo. En concreto, su sueldo no podrá ser superior al de un concejal del equipo del gobierno, cuyos ingresos brutos anuales ascienden a 72.600 euros.
Unos honorarios que superan en la actualidad los gerentes de la empresa de promoción urbanística Aumsa, José Antonio Martínez Roda, con un salario bruto anual de 76.000 euros y el de ValenciaTurismo Convention Bureau, Antonio Bernabé, que con 79.000 euros es uno de los gerentes mejor remunerados pese a los recortes anunciados por el Govern de la Nau. Entre los emolumentos más elevados se encuentra el del gerente del Palau de la Música, cargo que actualmente ocupa el profesor de Música Vicente Ros Peydró, con un salario de 72.400 euros.
Los recortes sí afectaron al sueldo del gerente de la Fundación Deportiva Municipal, puesto que actualmente ocupa el socialista José Vicente Berlanga que con 82.426 euros cobraba, hasta hace dos meses, más que el alcalde (82.682 euros). Tras los ajustes, sus honorarios se han quedado ahora en 65.000 euros. Una cantidad similar perciben la directora del Palacio de Congresos, Sylvia Andrés (65.000 euros) y el gerente de la EMT, José Vicente Alemany (62.000 euros) y el de Junta Central Fallera, José Martínez Tormo, cuyo salario, sin antigüedad, se sitúa en 61.131 euros. Por debajo de esta cifra se encuentran los responsables de Inndea, Rafael Monterde, con 59.000 euros.
El concejal de Hacienda, Ramón Vilar, principal impulsor de la nueva normativa de control y mejora de la transparencia de las fundaciones municipales „cuya elaboración se aprobó en el pleno del mes de julio, a instancias de una moción de Ciudadanos„ confía en tener aprobado el reglamento a principios de 2017.
Además de homogeneizar los sueldos de los directivos y trabajadores de las fundaciones, la normativa exigirá a los máximos responsables que hagan públicas sus declaraciones de bienes.
El nuevo plan de fundaciones será de aplicación a 18 entes públicos. Son la Junta Central Fallera, el Palau de la Música, el Consell Agrari Municipal, la Fundación Deportiva Municipal, la Universidad Popular, la fundación de Parques y Jardines Singulares, la Fundación de Empleo, la Fundación Policía Local de València, Aumsa, la EMT, Mercavalencia, Plan Cabanyal, el Palacio de Congresos, la Mostra de València (sin actividad actualmente), Valencia Convention Bureau, la Fundación CREA, Inndea, y el Observatorio del Cambio Climático.
La normativa no pretende un funcionamiento «uniforme» de todas las fundaciones dado que cada una tiene sus propias características, pero si poner coto a los «reinos de taifas» que son algunas de ellas. La mayoría de fundaciones y organismos se rigen por sus propios convenios laborales, lo que da lugar a una total disparidad en los sueldos y los mecanismos de contratación y fiscalización. El Govern de la Nau quiere que todas las fundaciones se rijan por el mismo convenio laboral del ayuntamiento regulando así tanto el salario como algunos complementos del mismo, como la antigüedad, que en algunos organismos como la Fundación Deportiva Municipal se han pagado a precio de oro.
Las fundaciones tendrán que informar de los contratos menores y convenios que realicen, así como aplicar criterios de publicidad, igualdad, concurrencia y no discriminación en la contratación de personal. Algunas fundaciones han sido muy cuestionadas por la contratación de personal afín al gobierno de turno. La fundación municipal dedicada a la innovación Inndea fue muy criticada durante la gestión de Rita Barberá por enchufar a familiares del PP, pero también lo ha sido por el motivos similares bajo la actual gestión de València en Comú.
