Apostar por un carril bici segregado y por la calzada también necesita de una nueva pedagogía para todos los usuarios de la vía, y es que por primera vez los conductores de vehículos en València han de ser conscientes de que en algunos cruces, además de los peatones, pueden aparecer ciclistas. Por ello, y en una medida preventiva que nunca se había implementado en la ciudad, la concejalía de Mobilitat Sostenible ha decidido pintar de un intenso color rojo las intersecciones más peligrosas del anillo ciclista, es decir, aquellas en las que los coches se incorporan a una calle o puente y los semáforos funcionan en fase ámbar.

Además de esta «alerta roja» pintada en el asfalto, en estas intersecciones se han colocado unas nuevas señales verticales con la leyenda «Preferencia ciclista». Y es que mientras el conductor ya tiene interiorizado que ha de parar en el giro de una calle para dar paso a los peatones, todavía existen muchos usuarios de vehículos a motor que desconocen que los carriles bici tiene prioridad cuando se produce una intersección y todos disponen del semáforo en verde. El Ayuntamiento de València reconoce que la medida busca evitar accidentes y atropellos, por ello ha extremado las precauciones.

El pintado de la intersección en rojo y el uso de señales ya se había implementado hace semanas en el tramo del anillo ciclista que discurre por Guillem de Castro, mientras que ayer se estrenó en el Pont de la Trinitat. Existe una gran diferencia entre ambos casos. Los cruces de Guillem de Castro cuentan con un «extra» de dificultad para los conductores, ya que existen plazas de aparcamiento de motos o coches paralelas al carril bici, por lo que se reduce el campo de visión.

Mobilitat Sostenible, sin embargo, intenta colocar plazas de estacionamiento para motos o liberar los cruces de estacionamientos para mejorar la visión de quienes se incorporan a una calle. La concejalía asegura que está «en permanente contacto con los vecinos» y que fruto de este diálogo ha modificado varios puntos considerados conflictivos.

Medida en expansión

De momento la medida de pintar las intersecciones de los carriles bici se aplicará en aquellos casos en que los conductores de vehículos a motor se encuentren semáforos en fase ámbar o en cruces donde no exista regulación semafórica. Así, la idea es generalizar esta acción en todos los tramos nuevos que se están construyendo en la ciudad.

Hace meses también se decidió extender los pasos de peatones sobre los carriles bici, debido al poco respecto que algunos usuarios tenían sobre los viandantes.