La Policía Local de València modificará gran parte de su estructura actual para tratar de paliar los problemas de convivencia que se generan por las noches, esencialmente el botellón y las molestias derivadas del ocio nocturno. Para ello creará la nueva Unidad de Convivencia y Seguridad (UCOS), integrada por 110 agentes que trabajarán exclusivamente por la noche. Además, este turno se reforzará con 24 nuevas patrullas repartidas por las unidades distrito, de manera que estén disponibles de forma global entre 154 y 206 agentes para atender los problemas nocturnos.

El anunció de la reorganización de la Policía Local lo realizó ayer la concejala de Protección Ciudadana, Anaïs Menguzzato, quien la justificó por la necesidad de «dar respuesta a las nuevas realidades de la ciudad, desde la proximidad y la prevención».

El primer paso, según dijo, será la creación de la nueva Unidad de Convivencia y Seguridad (UCOS) que dependerá directamente de la jefatura y contará con 110 agentes que trabajarán por la noche. «Nuestra prioridad es dar respuesta a los problemas de convivencia que genera el ruido, el ocio nocturno o el botellón y reforzar los controles de alcoholemia y la seguridad», dijo Menguzzato, quien anunció, así mismo, que el turno de noche ordinario se reforzará con 24 patrullas distribuidas por las unidades de distrito. Con esta actualización, los agentes que trabajan por la noche se incrementan de 154 a 206, dijo.

Descentralización

Además de atacar los problemas de convivencia, la reforma de la Policía Local de València servirá también para «completar el proceso de descentralización del cuerpo, reforzando la presencia policial en los barrios». Como resultado de este proceso, se creará la octava unidad de distrito, con sede en Molí del Sol (en el Parque de Cabecera), lo que «reduce el ámbito territorial de las siete unidades actuales para aumentar la efectividad de la respuesta».

Dentro de este proceso de descentralización, las funciones del cuerpo de GOES día (Grupo de Operaciones Especiales) serán asumidas por las unidades de distrito, mientras que las del GOES noche «se adaptan a la nueva realidad y serán asumidas por la nueva Unidad de Convivencia y Seguridad.

Así mismo, la concejala de Protección Ciudadana anunció que la División de Tráfico se transformará en la División de Seguridad Vial, integrando la Unidad de Control de Tráfico, compuesta por motoristas, agentes en bicicleta y radares; y la Unidad de Atestados, Transporte y Documentación.

Los agentes eligen

Menguzzato explicó que la próxima semana se firmará la orden para que entre en vigor esta reestructuración, que se aplicará de manera gradual, respetando la conciliación y las vacaciones de los agentes. «Por primera vez, el cambio se llevará a cabo contando con los sindicatos y con total transparencia para ofrecer a los agentes la oportunidad de elegir destino si así lo desean», explicó.

La reestructuración de la Policía Local va en la línea de la futura Ordenanza Municipal de Convivencia, que ya ha empezado a elaborarse con la colaboración de la cátedra de protección ciudadana de la Universitat de València y con las distintas entidades sociales y vecinales que tienen algo que decir en materia de seguridad.

Para hoy está previsto que la concejala Anaïs Menguzzato haga la presentación oficial de la nueva uniformidad de la Policía Local y aproveche el momento para presentar también a los medios de comunicación los detalles de la reorganización del cuerpo.