Los empresarios de apartamentos turísticos de València aceptan la imposición de una tasa municipal al turismo siempre y cuando ese dinero se reinvierta en turismo y en la oferta y cuidado de la ciudad. Así lo ha asegurado, al menos, el presidente de Apartval, José Benavent, quien admite que se trata de una cantidad pequeña que no disuadirá a los posibles visitantes.

Tal como ratificó el pasado miércoles el alcalde de València, Joan Ribó, el ayuntamiento estudia la imposición de una tasa al turismo, como ya existe en otras ciudades españolas y europeas como Barcelona. Se trata de recaudar una pequeña cantidad de dinero por turista y pernoctación, cantidad que cobrarían los propios establecimientos hoteleros y que luego entregarían al consistorio. La idea, no obstante, es que esa tasa no sea igual para los apartamentos que para los hoteles, siendo posiblemente más gravosa para los primeros.

Precisamente por eso, los apartamentos de la ciudad son los más afectados por esta medida y, a falta de conocer los detalles, están dispuestos a aceptar esta tasa con determinadas condiciones.

Según José Benavent, presidente de Apartval (Asociación(Asociación de Empresarios de Apartamentos de València) el sector podría asumir esa tasa y, dado que se trata de una cantidad pequeña por turista, no cree que tuviera una repercusión negativa en la cantidad de visitantes que llegara a la ciudad.

Ahora bien, dado que no deja de ser un gravamen para el turista y que ellos, los empresarios, harían las funciones de «oficina de recaudación», quieren saber primero cómo se va a cobrar esa tasa y cómo se va a utilizar ese dinero.

A juicio de Benavent, la recaudación debería utilizarse en la mejora de la ciudad, es decir, en mejorar la oferta turística de València. Y esencialmente, quieren conocer el protocolo que se va a seguir en el cobro y gestión de la tasa. «No nos parece mal siempre que revierta en la ciudad», asegura Benavent.

Medida en estudio

Cuando el alcalde, Joan Ribó, se refirió a esta posible medida confirmó que el Ayuntamiento de València la está estudiando, pero aseguró que no hay nada decidido en este sentido, es decir, que aún no se conoce ni la cuantía de la tasa, ni la fórmula utilizada para su recaudación ni la diferencia que habría entre apartamentos y hoteles. Al respecto, lo único que dijo es que será una tasa diferenciada para ambos tipos de establecimientos.

A lo que no parece estar dispuesto el consistorio es a imponer un cupo de turistas, es decir, a limitar el número de visitantes para evitar la saturación de los barrios más céntricos e incluso del espacio público. Otras ciudades y comunidades autónomas como Baleares ya han anunciado medidas en ese sentido, aunque por el momento tampoco se han puesto en marcha.