Los sindicatos de la Policía Local de València han reclamado un plan específico antiyihadista para las grandes celebraciones festivas y particularmente para las Fallas. El año pasado, aseguran, los agentes se vieron «claramente desbordados» por la gran cantidad de personas que se concentró en las «mascletades» y consideran necesario poner coto a esta situación, «más ahora con la amenaza terrorista que existe». No precisan si debería haber límite de aforo, perimetrar y filtrar a las personas, poner barreras físicas o todo a la vez, pero creen que la junta de seguridad debe trabajar este asunto y promover algo que para ellos es vital: ampliar la plantilla de forma urgente.
Ana Odena, responsable de Comisiones Obreras, recordó que «las fallas pasadas estuvieron desbordadas de gente», con mascletades que reunieron a tanto personal que se bloqueó la Estación del Norte y las salidas de metro.
Así pues, entiende que los políticos «tendrán que valorar eso, habrá que poner medidas, porque no puede desbordarse otra vez, y mucho menos ahora», en referencia a la amenaza yihadista.
Para Ana Odena, en València ha habido «bastante relajación» en este sentido, pues en el año 2015 ya pidieron la supresión de las patrullas unipersonales y la compra de chalecos antibalas por la amenaza terrorista y hasta ahora no se han suspendido esas patrullas y sigue sin haber chalecos, pese a las incorporaciones, para todos los agentes.
Más plantilla
Para Odena, las Fallas precisan claramente de un plan antiterrorista, una plan que, a su juicio, deben hacer los técnicos de seguridad. Y considera imprescindible aumentar la plantilla, pues con la actual no se posible dar respuesta a los retos que se han planteado. La responsable de Comisiones Obreras recuerda que la media de edad de la plantilla de València es de 48 años y que en los últimos ejercicios el número de agentes ha mermado considerablemente.
En este sentido, Benjamín Victoria, responsable de UGT, aseguró que en los años 2018 y 2019 se jubilarán otros doscientos policías, por lo que es necesario incorporar cien agentes anuales durante los próximos cuatro años para recuperar la plantilla, no los 33 que ha sacado el gobierno municipal. A su juicio, el incremento de las plantillas es esencial para la lucha antiterrorista, sin olvidar dice, que «aún colea lo de los chalecos».
Como Odena, Benjamín Victoria también considera esencial un plan de seguridad para las Fallas, muy especialmente un «plan de movilidad», ya que, a su juicio, el gran problema son los numerosos obstáculos que impiden el paso de personas, una circunstancia letal en caso de atentado y avalancha. «El año pasado habría sido una catástrofe si hubiera pasado algo y ahora, con esta situación, hay que perimetrar un poquito», dijo.
No ve posible poner límites de aforo o filtrar a los miles de personas que acuden a las mascletades, pero sí considera necesario bloquear todas las calles que conducen a la Plaza del Ayuntamiento y hacer planes, con estudios desde el aire, para facilitar la salida de personas. Propone incluso mover algunas fallas de su emplazamiento tradicional para facilitar el tránsito de personas.
