Combatir pobreza energética está en el ADN del Govern de la Nau, de hecho es uno de los pilares del pacto que firmaron Compromís, PSPV y València en Comú. De ahí que la inclusión de cláusulas sociales en los contratos municipales ha sido una de las medidas prioritarias que ha llevado a cabo el equipo de Joan Ribó.
Pero el Ayuntamiento de València también ha pasado a la acción antes de cerrar el compromiso con las empresas de energía. Así, en los dos años en los que ha elaborado el presupuesto (2015 fue compartido con el PP), ha concedido ayudas directas por valor de 479.825,27 euros para paliar la situación de desamparo energético, unas ayudas gestionadas a través de la concejalía de Servicios Sociales, dirigida por Consol Castillo.
Así, en 2016 el Ayuntamiento de València asumió el pago de 277 facturas de agua, 72 recibos de gas y 1.278 abonos mensuales de luz. En total se destinaron 227,883,57 euros para ayudar a las familias en situación de vulnerabilidad que tienen residencia en el «cap i casal».
En lo que llevamos de año (ocho meses completados) los recursos destinados a la pobreza energética ya superan a los del año pasado. Así, hasta la fecha se han pagado 177 facturas de agua, 1.123 de luz y 85 de gas, para las que se han destinado un total de 251.941,70 euros. En total, en estos dos años de gobierno completo la cifra se acerca al medio millón de euros.
3,5 millones para emergencia
A estos recursos hay que añadir que el Ayuntamiento de València ha puesto en marcha ayudas de emergencia social por valor de 3.500.000 euros, que se conceden a las personas que acuden a los servicios sociales.
La concejala de Servicios Sociales, Consol Castillo, insistió que el Ayuntamiento «está al lado de las familias, de las personas que se encuentran en una situación vulnerable, y trabajamos para resolver sus problemas y no permitir que se den casos de riesgo».
