La ampliación de la V-21 ha creado mucha polémica entre los vecinos de las localidades implicadas y demás colectivos guardianes de la huerta. Ahora un informe de la ingeniera civil Nel·la Saborit, especialista en urbanismo, movilidad y tránsito, secunda este rechazo de aumentar a tres carriles el acceso norte a la ciudad de València.

El escrito titulado «Informe alrededor del proyecto de ampliación y reordenación de enlaces de la carretera V-21 a su tramo final» ve innecesaria la ampliación de un tercer carril en la vía antes citada. Además, también rechaza la posibilidad de construir un nuevo enlace en la autopista porque convertiría al actual bulevar paralelo a la playa de la Patacona, CV-311 y C. de la Serra d'Aitana, en una vía de entrada de alta capacidad para vehículos privados a València.

Entre los argumentos que Saborit destaca se encuentra el poco tráfico de la zona. Un aumento con otro carril provocaría un «efecto llamada» para los vehículos que habitualmente no frecuentan esta carretera o para los usuarios que por comodidad cogen el transporte público. Esta ampliación haría que en tres meses la vía estuviera en la situación actual.

Otro de los argumentos con los que se defiende el informe es que habría un aumento de vehículos pesados y por tanto una subida en la contaminación atmosférica y acústica, por lo que sería incompatible con una calidad de vida aceptable para los vecinos de los barrios afectados por el tránsito de esta carretera.

Asimismo, el enlace con la CV-311 también sería «incompatible», ya que este camino discurre por dentro de un entorno urbano, el de Alboraia, siendo de un tránsito con baja capacidad, pasaría a convertirse un tráfico de alta capacidad procedente de la V-21. En consecuencia habría un aumento en los sonidos, la velocidad y la congestión, sobretodo en hora punta, haciendo este acceso incompatible con los vecinos y vecinas del municipio.

Entre las soluciones que Saborit aporta en su informe pone en valor una mejor gestión del tránsito, sobre todo en las vías de alta capacidad de acceso a València.

Para ello, la ingeniera civil ofrece unas medidas que mejorarían este aspecto. La implantación de una velocidad variable mediante la armonización de la misma y la implantación de sistemas de control de velocidad.

También habría que gestionar y restringir los aparcamientos de destino (dentro de la ciudad). Por último, mejorar las conexiones entre transporte público por delante de los vehículos privados.