Son los terceros presupuestos para Ramón Vilar y no se atreve a decir que sean los mejores, pero está convencido de que son los que necesita la ciudad en este momento. No hay grandes proyectos, admite, pero llegan a todos los rincones. Y además han sido relativamente fáciles de ajustar entre todas las concejalías y los tres socios de gobierno.
Estos presupuestos superan los 800 millones y hay más de 70 en inversiones. ¿Son los mejores de los tres que ha hecho ya este gobierno?
Yo no diría que son los mejores. Cada año intentamos adaptarlos a las necesidades y este año hemos hecho eso. Obviamente no cubren todas, pero hemos hecho un esfuerzo para que las principales necesidades se cubran. Hay un incremento en el capítulo de personal porque cogimos el ayuntamiento con un déficit absoluto de personal para gestionar servicios tan básicos como la Policía Local.
El tema de la falta de personal ha sido un argumento recurrente para justificar atascos en determinados servicios como las licencias. ¿Es tan grave la falta de plantilla que puede justificar todos los problemas?
A ver. La administración local sigue siendo un aparato de funcionamiento lento. Después de la situación que vivimos en la Generalitat y con el anterior ayuntamiento, nosotros no estamos dispuestos a quitar controles en contratación, en gastos etc., por tanto sí que es cierto que en esa parte hay cierto embudo administrativo, pero también garantiza que el dinero de los valencianos tenga un control en su gasto. Dicho eso, hay otras cuestiones que hay que agilizar, como son las licencias. Hay que reestructurar el personal y ya se está haciendo. Y luego es verdad que digerir el presupuestos municipal, que el año pasado tenía 65 millones de inversiones, requiere una maquinaria importante. No estamos hablando de 15 ni de 20 millones.
Precisamente le quería preguntar por eso ¿Las inversiones hacia donde se han encaminado este año?
Las inversiones son un tema que interesa mucho al equipo de gobierno no solo porque mejoran la vida de los ciudadanos sino porque generan empleo.
¿Y hacia dónde se enfocan este año?
No hay inversiones de carácter espectacular, icónicas, pero estamos cubriendo necesidades más básicas. Si te fijas, casi ninguna supera el millón de euros. Está la de la plaza de la Reina, que es la estrella, y el parque central (naves de Ribes), pero no hay un gran proyecto de ciudad. Eso se abordará cuando se cubran las necesidades. Ese gran proyecto puede ser el entorno de la Plaza de Brujas y todo el sistema de plazas que hay alrededor, como La Merced, Doctor Collado...
¿Ha sido fácil contentar a todas las concejalías?
No. Si fuera fácil yo no tendría trabajo, iría más al fútbol (ríe). No. Si fuera fácil querría decir que los concejales tienen cierta desidia en la gestión. Pero no, todos piden más dinero porque quieren hacer cosas y porque entienden que la ciudad está necesitada de más dotaciones. No ha sido dramático, pero ha sido una negociación de hormiguita, sin ruido, para sacar los presupuestos sin problemas. Hay un equilibrio político que refleja las necesidades de la ciudad.
Este año la ejecución presupuestaria está siendo baja. ¿En 2018 se podrá mejorar? ¿Se han pensado los presupuestos para mejorar la ejecución?
Sí. Hemos dado prioridad a aquellas inversiones que tenían ya el proyecto o hecho y aprobado o muy avanzado de redacción. Por ejemplo, inversiones que necesitan suelo y que ya tenían el suelo disponible. Y como seguimos presos de la Ley de Estabilidad Presupuestaria, sabemos que una parte de las inversiones tendrán que ir a lo que se llama inversiones financieramente sostenibles.
En el capítulo de ingresos, se ha anunciado un plan para embargar cuenta a quienes no paguen multas o impuestos. ¿Eso cómo va a funcionar?
Muy fácilmente. El ayuntamiento sólo puede embargar en oficinas bancarias radicadas en su término municipal, por tanto si una cuenta está fuera se queda sin embargar. La gente que nos visita de otros pueblos utiliza la picaresca y ya saben que no le podemos embargar las multas. Pero ya se está haciendo por medio de la Generalitat, le enviamos una remesa y desde allí se busca a las entidades bancarias y embarga.
¿Y ahora con los impuestos se hará igual?
Exacto. Ahora vamos a ver si ampliamos el convenio de las multas o hacemos uno específico para la deuda tributaria.
