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Restos arqueológicos

Riba-roja pedirá a Renfe que reponga los restos de la muralla de Valencia la Vella

Parte del yacimiento visigodo fue arrasado en los años 70 para la construcción de la antigua línea férrea entre València y Llíria

Otra València visigoda al descubierto

Otra València visigoda al descubierto

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Otra València visigoda al descubierto h. garcía | valencia

El Ayuntamiento de Riba-roja va a reclamar a Renfe, dependiente del Ministerio de Fomento, que reponga los restos arqueológicos del yacimiento de Valencia la Vella gravemente expoliados en los años 70 durante la construcción de la antigua línea del ferrocarril Valencia-Lliria.

El lienzo norte de la muralla quedó arrasado hace cuatro décadas para utilizar la piedra como material de relleno. Los medios de comunicación se hicieron eco del expolio del yacimiento, que entonces se pensaba que era de época romana, evitando que continuase, lo que no impidió que un tramo amplio del recinto amurallado en su zona norte fuera arrasado hasta los cimientos.

Su rehabilitación en ese punto es imposible por el alto grado de deterioro, afirma el arqueólogo Albert Ribera, coordinador de la campaña de excavaciones que el Ayuntamiento de Riba-roja, en colaboración con el Institut Català d´Arqueologia Clàssica, han llevado a cabo en Valencia la Vella, arrojando luz sobre la importancia estratégica, política y comercial de este enclave.

Así las cosas, el Ayuntamiento de Riba-roja reclamará a Renfe que reconstruya la muralla derribada y asuma el coste por el menoscabo causado al patrimonio valenciano.

La intención del ayuntamiento de Riba-roja, con el socialista Robert Rafa al frente, es poner en valor el conjunto del yacimiento visigodo de Valencia la Vella, la mitad del cual es propiedad privada. El consistorio ha intentado negociar con los dueños la compra de los terrenos, si bien la falta de acuerdo ha llevado al alcalde a iniciar los trámites para expropiar el suelo.

El ayuntamiento quiere explotar el potencial cultural y el atractivo turístico de las ruinas arqueológicas de Valencia la Vella, declarado Bien de Interés Cultural y ubicado en pleno Parque Natural del Turia, lo que le da un doble blindaje, y al que se puede llegar en bicicleta.

En poco tiempo se espera incluso la llegada del metro, pues hay proyectada una parada que dará servicio a las urbanizaciones del entorno. Riba-roja ya restauró y musealizó las ruinas del palacio-fortaleza de época visigoda del Pla de Nadal. La recuperación de las ruinas de Valencia la Vella completaría y reforzaría el potencial turístico y cultural de Riba-roja como centro arqueológico visigodo.

Tal como ha informado este diario, las dos campañas de excavaciones llevadas a cabo el pasado verano en Valencia la Vella de Riba-roja revelaron nuevos e interesantes datos sobre este yacimiento arqueológico, estratégicamente situado junto al río Turia y protegida por el escarpado barranco de la Cabrasa.

Los arqueólogos han determinado que la ciudad era mayor de lo que se pensaba. Tenía casi cinco hectáreas de superficie, una potente muralla con once torreones, varias iglesias y un palacio. Fue no solo un recinto fortificado como se pensaba, sino una ciudad con entidad propia y una función estratégica en la defensa de la Valencia actual, ubicada en una orografía plana y más vulnerable.

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