Joan Ribó mostró ayer el interior del monasterio de La Roqueta al presidente de la Acadèmia Valenciana de la Llengua, Ramón Ferrer, un día después de comunicar a los vicentinos que tendrán el espacio que necesitan para desarrollar sus actividades en el edificio. Asimismo, el alcalde recordaba ayer que las dimensiones de este inmueble permiten que acoja además otro tipo de usos y actividades culturales que no se han decidido aún, aunque como adelantó este periódico la AVL es firme candidata.

El primer edil, que destacó que los usos no están determinados, explicó que en ese encuentro las entidades vicentinas le plantearon «sus necesidades» y resaltó que se comprometió «a trabajar para que tuvieran un lugar». Asimismo, apuntó que se tendrá en cuenta su iniciativa de tener «una ruta vicentina, con cierta similitud con el Camino de Santiago» y de «trabajar en esa dirección».

Joan Ribó comentó además que Sant Vicent de la Roqueta es «un edificio muy grande» y que las asociaciones vicentinas «no necesitan todo el espacio», por lo que manifestó que se trabajará para «buscar» otros usos. El responsable municipal aseveró, recientemente, que los usos de este inmueble serán culturales.