La portavoz de València en Comú, María Oliver, aludió ayer la negativa del Gobierno a financiar la reurbanización del entorno del Tinglado 2 (cuyo coste asumirán la Generalitat y el ayuntamiento) y apuntó que tras la reunión del lunes «queda en evidencia que el único interés del Estado en el consorcio es el pago de la deuda, por eso rechazan invertir en la ordenación de la necesaria plaza adjunta» al Tinglado.
La reurbanización del entorno del Tinglado, presupuestada en 1,4 millones de euros, libera de coches el perímetro del Tinglado, generando un amplio espacio de uso ciudadano. Las administraciones valencianas exigieron en el consejo rector del lunes y en las reuniones previas que el Gobierno asuma su parte (40%) del coste de la obra. El conseller de Hacienda, Vicent Soler, insistió ayer en reclamar al Estado que invierta en esta obra porque revalorizará la Marina y tendrá un retorno económico.
La fuerte deuda contraída con el Instituto de Crédito Oficial (ICO) para pagar las obras de la Copa del América (465 millones de euros) lastra desde hace más de una década la gestión de la Marina de València. Gobierno, Generalitat y ayuntamiento trabajan desde hace meses en un plan de viabilidad económica para resolver la financiación de la deuda. Las alternativas que estudia la comisión técnica, donde también participa el Instituto Valenciano de Finanzas, y que se presentarán previsiblemente en abril pasan por la reestructuración de la deuda con una ampliación del plazo de devolución o por la condonación de una parte de la deuda.
