A la espera de que el Arzobispado considere o no la posibilidad de reunirse con el ayuntamiento para debatir la necesidad o no de declarar Bien de Interés Cultural (BIC) la festividad de la Virgen de los Desamparados, los partidos que algo tuvieron que ver en el debate realizan sus análisis. Ayer lo hizo el Partido Popular en boca de su portavoz Eusebio Monzó, quien ha asumido las cuesitones de fiestas en ausencia de Félix Crespo. Y ayer sacó la conclusión de que el Grupo Municipal Ciudadanos se precipitó «al promover una declaración sin consultarlo con el Arzobispado. Nosotros apoyamos cualquier iniciativa, pero hay que hacerlo con rigor, respetando los conductos institucionales preestablecidos y escuchando a los actores principales». Un tirón de orejas que casa con las explicaciones de la concejala Amparo Picó, que citó anteayer a tres interlocutores diferentes, pero ninguno de ellos el propio Antonio Cañizares.

Y recordó precisamente que Crespo, al presentar la moción, «ya advirtió que la declaración dependía del Arzobispado porque se trata fundamentalmente de una celebración religiosa».

«Es cierto que hay actos alrededor de la Virgen, como la Dansà, la Ronda a la Mare de Déu, el concierto o el mercadillo de l´Escuraeta que forman parte de un conjunto de tradiciones arraigadas en la ciudad de Valencia en las que el Ayuntamiento y otras entidades cívicas tienen una participación determinada. Por este motivo, aunque con matices, apoyamos en el Pleno la posibilidad de que se estudiara la declaración de BIC, siempre y cuando la Iglesia, encargada de preservar el contenido religioso, que es el elemento fundamental de la fiesta, considerara su idoneidad» aseguró Monzó, por lo que, a pesar del apoyo, entiende la negativa del Arzobispado, desde el punto de vista de éste: «es acertada la respuesta dada, porque la devoción hacia la Virgen va mucho más allá de lo puede ser la búsqueda de un nuevo motivo de atracción turística para la ciudad. La figura del BIC está más centrada en la protección de hitos monumentales o culturales que en el reconocimiento de una celebración religiosa».