Precisamente, para crear un ecosistema en Valéncia capaz de acoger y desarrollar las nuevas startups valencianas, la concejala de Desarrollo Sostenible y primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de València, Sandra Gómez, introdujo la primera sesión de trabajo y se entrevistó después con Susan Gisesecke, directora de Global Engagement de la Universidad de Berkeley, con quien compartió iniciativas y experiencias en este sentido.

Según explicó Gómez al término de la reunión, en València ya hay 500 startups y se crean 100 cada año gracias, en parte, a las 15 aceleradoras existentes. Por tanto, la idea no es tanto exporta talento, sino importar conocimientos y aplicar el modelo Silicon Valley a València.

Por el momento, dijo, ya existen potentes universidades para formar talento y está en marcha la creación de un "hub" tecnológico en la Marina de València y en toda la fachada litoral, desde el Campus de Vera hasta el Grao.

Lo que faltaría ahora sería dirigir ese talento hacia el emprendedurismo, y en ese sentido, el modelo Berkeley es interesante, dijo Gómez. Según le explicó Susan Gisesecke, la clave es generar líderes colaborativos, mezclando diferentes perfiles para sacar una nueva idea. Es lo que se llama colíderes. En esa búsqueda se organiza cada año un campamento con 400 estudiantes en una ciudad del mundo, para la cual se ha propuesto, por cierto, la propia Valéncia.

Sandra Gómez cree, asi mismo, que hay que buscar inversores para estas empresas y crear lo que se llama una ciudad abierta, donde la presencia internacional sea destacada y se avance hacia la colaboración y la puesta en común de ideas y modelos.