El pleno aprobó ayer, con la abstención de Ciudadanos y el apoyo del PP, la nueva ordenanza municipal de mercados, que sustituye a la anterior de 2004, y que deja fuera cuestiones como las degustaciones de productos en los puestos y el control del acceso de los grupos de turistas.

Así lo explicó el presidente de la Asociación de Vendedores del Mercado Central, Francisco Dasí, quien destacó que aunque las alegaciones que la asociación ha formulado en este sentido no se hayan tenido en cuenta, seguirán insistiendo en la flexibilización de la normativa sanitaria para que los vendedores puedan ofrecer ese servicio de degustación extra como reclamo de sus negocios. El concejal de Mercados, Carlos Galiana, reiteró la postura reticente del Govern de la Nau en relación a esta actividad.

Compromís no quiere abrir demasiado la mano con las degustaciones para mantener el carácter de mercado tradicional y evitar que los puestos de productos frescos acaben funcionando como restaurantes.

El portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, reprochó en el turno de intervención que la nueva ordenanza no atienda a las nuevas necesidades de los mercados y a los nuevos usos de los clientes y echó en falta que se regulen cuestiones como la venta «on line».

Galiana replicó a Ciudadanos que pidan al equipo de gobierno diálogo con los vendedores y luego no presenten alegaciones a la ordenanza para intentar mejorarla, al tiempo que recordó que solo tres mercados (Central, Mosen Sorell y Benicalap han alegado). El PP votó a favor de la ordenanza pero pidió la formación de una comisión de seguimiento para hacer aportaciones.

El pleno también aprobó el informe de estado de ejecución presupuestaria que el concejal de Hacienda, Ramón Vilar, defendió como razonable dado el nivel de inversión que se gestiona y que multiplica por cinco (de 20 a 100 millones) la de la etapa del PP.

El portavoz de Ciudadanos acusó, en este punto, al Govern de la Nau de bloquear las inversiones y de su mala gestión de los recursos. Bloquean inversiones para la policía y bomberos mientras «aprueban subvenciones para entidades independentistas», reprochó Giner.

El concejal del PP Eusebio Monzó por su parte recordó los informes de instituciones como la Sindicatura de Comptes que advierten de manera reiterada de la falta de control con el fraccionamiento de contratos y los contratos menores, que han pasado de 500 a 700.