Uno de los efectos complementarios especialmente beneficiosos para los vecinos más próximos a los terrenos del parque central ocupados por el concesionario de automóviles es la próxima retirada del fibrocemento de los tejados de sus instalaciones.

Tras la actuación municipal del pasado martes, 17 de abril en relación a los terrenos ocupados por el concesionario de coches, la constructora y dirección de obra ya han podido acceder a las parcelas para hacer una estimación de la carga de trabajo que pueden suponer los trabajos de retirada de fibrocemento que hay en cubiertas y bajantes de parte de las instalaciones del taller, así como verificar sus características y estado. Los tejados de fibrocemento ocupan unos 1.100 metros cuadrados aproximadamente. A ello habrá que añadir los elementos más lineales como las tuberías y conductos.

El fibrocemento está prohibido en España desde el año 2002. Este material se fabricaba hasta entonces con polvo de amianto blanco cuya nocividad está calificada por la Organización Mundial de la Salud por su incidencia en el riesgo de diferentes cánceres por inhalación de sus partículas.

El procedimiento para efectuar estos trabajos contempla rigurosas medidas para la protección de los operarios, del medio ambiente y para el transporte y almacenamiento de los residuos. La actividad debe, por este motivo, contar con la preceptiva autorización, control y supervisión de la correspondiente autoridad laboral y ambiental, en este caso la Generalitat Valenciana.

Por un lado, la retirada de las placas de fibrocemento se realiza conforme a una rigurosa normativa, la Ley 10/1998, de 21 de abril, de Residuos y el Real Decreto 396/2006, de 31 de marzo, que regula el tratamiento adecuado de estos residuos calificados como peligrosos y tóxicos. Estas normas establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud aplicables a los trabajos con riesgo de exposición al amianto.

Medidas de seguridad

Entre otras medidas de protección y seguridad, los trabajadores van ataviados con trajes, mascarillas, gafas, guantes y botas especiales. Cada día, tras la jornada laboral, deben someterse a un proceso de descontaminación personal, y posterior desecho de su vestuario, en una caravana con tres cabinas individuales acondicionadas para ello, que se instala en una zona delimitada y de acceso restringido. El agua utilizada se filtra con un sistema especial.

Todo el material desechable se considera igualmente residuos con amianto que se recoge y transporta en recipientes de macro encapsulado adecuados a tal efecto. La empresa especializada se hace cargo del traslado a un Depósito de Seguridad sanitariamente controlado.

En las obras de urbanización del parque ya se realizaron trabajos de retirada del fibrocemento que había en las antiguas edificaciones ferroviarias antes de acometer su rehabilitación.

Otras actuaciones

Además de la retirada del fibrocemento, otras de las actuaciones inmediatas, tras la disponibilidad de las parcelas del concesionario, es la realización de calas y sondeos que determinarán si hay o no contaminación en el suelo, de sustancias como aceites o carburantes, un trámite que exige la ley en terrenos afectados por determinados usos o actividad industrial como en este caso la realizada por el concesionario.