El concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, desveló ayer al término de la Comisión de Urbanismo, que la antigua sede del Ministerio de Hacienda en Guillem de Castro tiene problemas estructurales, en concreto aluminosis, que han motivado el traslado del servicio y el cierre hace dos años del inmueble, que además carece de protección patrimonial. «Es un edificio de una época, con una arquitectura muy espectacular, pero en realidad no está catalogado», destacó Sarrià, quien añadió que «en su momento habrá que valorar si se mantiene» o hay que derribarlo.
Como ha informado este diario, representantes de la Agencia Tributaria se han reunido ya en dos ocasiones con la Concejalía de Desarrollo Urbano para pedir un cambio de usos de la antigua Delegación de Hacienda pasando de dotacional a terciario, concretamente, «hotelero».
Sarrià recordó el inmueble «tiene un carácter dotacional público, y como tal está en el borrador del Plan Especial de Ciutat Vella, y así continuará». Una vez el plan sea sometido a exposición pública, previsiblemente el mes que viene, el Ministerio de Hacienda puede presentar alegaciones para solicitar su cambio de uso, una vez ha comunicado su desafectación de uso por su parte. «Pero ese cambio de uso no implica necesariamente que sea a hotel», recalcó Sarriá, quien añadió que la filosofía del Govern de la Nau es «preservar el uso residencial en Ciutat Vella lo que pasa por limitar el crecimiento exponencial de los usos turísticos en viviendas».
En esta línea el ayuntamiento aprobó una moratoria a los hoteles y apartamentos turísticos, que se levantará cuando se apruebe el nuevo plan especial de Ciutat Vella.
El concejal de Desarrollo Urbano destacó que el destino final del edificio «habrá de ser valorado en su momento» cuando el ministerio solicite el cambio de uso. Sarrià explicó que en el momento en que el ministerio desafecte el inmueble «el ayuntamiento tiene que ser informado y podría, si lo considera, negarse a cambiar el uso e incluso expropiarlo». «El gobierno municipal valorará en su momento los costes y si procede o no un nuevo uso», apuntó.
En la comisión de urbanismo se aprobó el Plan Especial de Protección del Botánico que recibió numerosas alegaciones por parte de los vecinos cuyas fincas quedaban fuera de ordenación. En la versión final, se suaviza esta calificación para que las viviendas no pierdan valor hipotecario.
En la comisión se aprobó, a instancias de una moción de Ciudadanos, abrir a más servicios municipales la comisión municipal de Patrimonio, pero sin dar entrada a colectivos ciudadanos, universidades y asociaciones.
