Lo anunciaron en febrero de 2018 y ya se pueden ver cámaras en las autobuses de la EMT, aunque aún no funcionan. La Empresa Municipal de Transportes (EMT) de València decidió a principio de este año incorporar 37 nuevos autobuses, 35 de ellos de tecnología híbrida y dos eléctricos, para "reducir las emisiones" contaminantes, "el consumo" de combustible y el ruido en la ciudad.

Pero, además,los autobuses incluyen cámaras de seguridad para "tener una visión completa de lo que pasa dentro y fuera" del vehículo, así como puntos de recarga USB. Las cámaras permitirán sancionar a quien esté estacionado en el carril bus de forma incorrecta y registrar todo lo que pase en el interior del vehículo.

La incorporación de los nuevos vehículos permitirá también que la EMT transporte más viajeros cada día, casi 9.000 personas, dado que se incorporan articulados que contarán con mayor capacidad.

De los 35 autobuses híbridos adquiridos, hay catorce estándar de la marca Man, otros siete estándar de la marca Iveco y catorce articulados también Iveco. Por lo que respecta a los dos vehículos eléctricos, los responsables municipales han explicado que se han adquirido a través de cada una de las dos marcas que presentaron ofertas --Irizar y ByD-- con el objetivo de poder testarlos de manera individual, dado que se trata de nueva tecnología en uso.

La adjudicación total de todas estas adquisiciones asciendió a 14.563.838 euros, una cifra que supuso "una considerable rebaja respecto al presupuesto de salida del concurso, fijado en 16.235.000 euros".

El concejal de Movilidad Sostenible, Guiseppe Grezzi, subrayó que además de reducir emisiones y consumo los nuevos autobuses permitirán ahorrar costes puesto que llevará a una "eficiencia económica importante" y ofrecer "mejor servicio", especialmente, en la zona centro.

Cuando empezarán a funcionar las cámaras que pueden suponer una vía más de recuadación, aún no se sabe. Sin embargo, ya están instaladas.