La fecha de las Fallas son intocables bajo peligro de muerte. Se lanzó una sonda hacia la de San Vicente Mártir y también hubo conato de rebelión. Sin embargo, San Vicente Ferrer, la Virgen de los Desamparados y el Corpus están trasladados, desde tiempos inmemoriales, al fin de semana.

Hoy, jueves, ese día que luce más que el sol, es el que el calendario marca para la exaltación de la Eucaristía. Pero los festejos se trasladan al fin de semana desde tiempos inmemoriales. Tanto es así, que precisamente hoy se celebra el pregón de la «Festa Grossa». Que se prolongará durante tres días trepidantes, seguramente no todo lo reconocido que merece.

Y así, entre el entramado asociativo de Amics del Corpus (prácticamente todos ellos falleros, conocedores pues de los entresijos asociativos de toda fiesta que se precie), el Cabildo, los Campaneros, el ayuntamiento, los vendedores de l'Escuraeta, los propietarios de los balcones, los niños que representan el Misteri y el pueblo en general, se compone una fiesta heterogénea, difícil de comprender a primera vista (está llena de metáforas), pero que es un estímulo permanente a los sentidos.

El programa de hoy incluye, desde las ocho en la iglesia del Patriarca, la misa de la festividad, oficiada por el cardenal Cañizares, y el pregón a cargo de Jaime Sancho.

Durante la tarde se habrá procedido a «plantar» la figura del Santo Cáliz que, realizada en vareta, es el nuevo elemento enriquecedor de toda la escenografía festiva. También hoy se celebrarán oficios religiosos en Santa Catalina promovidos por la Adoración Nocturna desde las 18 horas.

Para el viernes quedará el tapiz, que el ayuntamiento instala en la fachada de la Basílica. El elemento central del tapiz representa este año a dos de los ángeles músicos que hay en la cúpula de la capilla mayor de la Catedral.

Balcones y escaparates

Otro elemento que faltaba por confirmar era la participación en el concurso de balcones y fachadas engalanados y el de escaparates. Todos ellos organizados por Amics del Corpus. Serán nueve y tres, respectivamente, los que tomarán parte en un concurso que pretende realzar estéticamente el trazado de la procesión.