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Hallazgo

El CVC pide inversión en los servicios de arqueología ante la reactivación de las obras

El Consell de Cultura advierte de las carencias de la investigación en el hallazgo de la puerta de la Trinidad durante unas obras de canalización

Restos de la muralla hallados junto al Temple. Germán caballero

El Consell València de Cultura (CVC) ha llamado la atención en un informe aprobado por el pleno del pasado 28 de mayo sobre la precaria situación en la que se encuentran los servicios municipales de arqueología de los ayuntamientos, como el de València, donde la falta de personal y de inversión impiden controlar y atender con el rigor científico suficiente los hallazgos arqueológicos.

Así ha sucedido, apunta el informe del Consell València de Cultura con el reciente hallazgo durante las obras de canalización del agua potable que lleva a cabo la Concejalía del Ciclo del Agua en la marginal derecha del cauce histórico del Turia, donde han salido a la luz valiosos restos arqueológicos como una de las puertas de la muralla cristina, la de la Trinidad, construida sobre una construcción anterior, califal e incluso romana.

El Consell de Cultura asegura que en los últimos meses ha redoblado su interés por los arqueólogos «ahora que los efectos de la burbuja inmobiliaria y de la crisis de la construcción han pasado y tanto el sector público como en el privado van regresando a la normalidad». Un repunte de la actividad constructora constatado por este diario en zonas de alto potencial arqueológico como Ciutat Vella donde los permisos arqueológicos se han triplicado en apenas dos años.

En su informe, el Consell València de Cultura cuestiona la mercantilización de la profesión de arqueólogo que en los años florecientes de la construcción pasó por ley a estar financiada por los promotores privados. Esto, apunta el órgano consultivo, «merece una reflexión sobre si la capacidad de juicio independiente del arqueólogo se puede ver mermada o no en el marco de un trabajo urgente al servicio de una empresa inmobiliaria».

El Consell pone en solfa a los ayuntamiento por «relegar o dificultar» los planes de investigación arqueológica y recuerdan que solo en el depósito municipal de arqueología de València se estima que «hay unas 30.000 cajas con material arqueológico de las que al menos la mitad podrían tener un valor arqueológico alto».

El Consell de Cultura, tras consultar a los profesionales de la arqueología, asegura que ante la nueva actividad en el campo de la construcción es notoria la paralización de las tareas y programas de investigación independiente, como «es lamentable que se hagan informaciones someras sobre yacimientos de alto interés que s paralizan luego por la premura de tiempo y dinero».

«Es urgente»

Alude el Consell al reciente hallazgo de la puerta de la Trinidad de la muralla cristiana y asegura que «solo el trazado de una tubería de agua potable en la ronda de las antiguas murallas ha proporcionado once puntos de interés arqueológico en València». «Imposible atender esta tarea nueva con un plan científico sin mayor dotación de personal», remacha el informe.

El Consell llama la atención en este punto sobre el envejecimiento y la falta de renovación de los profesionales del Servicio de Investigación Arqueológica Municipal (SIAM) donde la edad media del departamento es de 60 años. «Contrasta vivamente que los funcionarios de este departamento a principios de los 90 eran diez y en la actualidad son solo cuatro». Con nuevas jubilaciones a la vista y sin previsión de relevo, el servicio se encuentra en precario.

Los casos, advierte el documento, «se multiplican y las carencias de profesionales se agravan ante la imposibilidad de ampliar plantillas y las jubilaciones».

Es «urgente», concluye el Consell de Cultura, que las administraciones públicas presten más atención a la arqueología, «necesitada de inversiones, dotación de personal y atención preferente». La reactivación de la construcción hace necesario, apunta el CVC, que los ayuntamientos, diputaciones y la Generalitat doten a sus servicios Culturales de plazas de arqueólogos para «atender las necesidades de inspección con celeridad para que pueda volver a haber programas de investigación científica independiente». Es urgente, añade el órgano consultivo, que los ayuntamientos que almacenes piezas arqueólogos las cataloguen y valores y las pongan a disposición y conocimiento del público.

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