La firma Obremo, S. L., será la encargada de reformar el antiguo mortuorio del complejo hospitalario de Campanar para que pueda acoger de forma provisional el servicio de urgencias de la zona. La empresa se ha comprometido a hacer el trabajo por un presupuesto de 685.000 euros, un 17 % menos del inicialmente previsto por la administración.

Formalizado ya el encargo, la empresa dispone de seis meses (desde el acta de replanteo) para hacer realidad los trabajos. Actualmente las urgencias de Campanar están situadas todavía en la planta baja del edificio principal del antiguo hospital, que está condenado al derribo. El traslado de urgencias dejará vía libre para el desamiantado (que ya se ha licitado por un presupuesto de 3,5 millones de euros) y posterior derribo del edificio central, después de que el año pasado se cerraran las últimas plantas de asistencia a enfermos de larga estancia que quedaban abiertas.