La ciudad de València es desde ayer la primera ciudad española con un Consejo Alimentario Municipal, que se ha creado con el objetivo de involucrar a un núcleo importante de actores clave del ámbito agroalimentario local para la futura definición de las políticas alimentarias en el municipio.

El alcalde, Joan Ribó, fue el encargado de presidir la constitución del consejo, que se celebró en el hemiciclo de la casa consistorial y en el que se han votado y conformado los órganos de gobierno que tienen que velar por el buen funcionamiento y desarrollo del órgano, han informado fuentes municipales.

El Pleno del Consejo Alimentario Municipal contará con la participación de unas 30 entidades, entre las que se encuentran sindicatos agrarios y representantes de las federaciones empresariales, representantes del tejido vecinal, organizaciones de consumidores y responsables de las universidades y colegios profesionales.

Sin embargo, el portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, ha denunciado el «nacimiento en falso» del Consejo Alimentario, pues Ribó se habría «olvidado de dar voz a todos los agentes implicados», lo que le obligó a aplazar la elección de los órganos de gobierno: Comisión Permanente y Vicepresidencia».