La presidenta de la Federación de Vecinos, María José Broseta, recorrió ayer junto con representantes vecinales del Cabanyal las calles San Pedro, Pescadores y adyacentes, constató que «ha habido pocos avances en tres años». La presidenta de la Asociación de Vecinos del Cabanyal, Josefa Dasí, explicó que la limpieza y la seguridad ha mejorado, y como indicador aludieron al hecho de que las cofradías han empezado ya a recuperar los itinerarios de la zona cero que durante muchos años y por seguridad han preferido evitar en el paso de las procesiones. Con todo, los vecinos aseguran que hay mucho por hacer. La rehabilitación por parte de los propietarios privados avanza mientras la obra pública no lo hace al mismo ritmo. Broseta aseguró que el recorrido por el barrio «es impactante». Casas en ruinas, solares abandonados y aceras y asfalto con socavones y en mal estado forman parte del paisaje urbano del barrio de este barrio, donde Broseta insistió en que «hay que actuar ya». Broseta reclamó ayer «mayor celeridad» en los proyectos de reurbanización, entre ellos los de la calle Barraca y la plaza del Rosario. «El barrio estaba muy degradado tras los años de abandono que sufrió con el anterior Gobierno del PP, pero creemos que en estos tres años algo más se podía haber hecho», dijo Broseta. La administración «debe ser más ágil».
En la misma línea se pronunció el portavoz de Salvem el Cabanyal, Faustino Villora, quien aseguró que la venta de droga sigue extendida en la calle Pescadores y su entorno.
